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El huron dejo de perseguir a Hoseok y vio a Jungkook y a un extraño chico pero muy muy guapo.

— Minnie, ¿No estabas con Yoon y Taehyunggie? — Dijo Hoseok mientras lo agarraba y lo ponía en su regazo.

El huron seguía mirando cada faccion de Namjoon.

Hoseok se dio cuenta de eso y decidió hacerle un par de preguntas a Namjoon.

— Nam, ¿Te gustan los híbridos?

El pelinegro volteo y miro a Hoseok.

— Si, son lindos y tiernos. — Dijo Namjoon sonriendo y dándose cuenta del pequeño animal que tenía Hoseok sentado en una de sus piernas.

Jimin escuchaba todo atentamente y no logro controlar sus orejitas que se movían de ilusión y emoción por lo que dijo el desconocido llamado Namjoon.

— ¿Y atreverías a estar con uno? — Pregunto esta vez Jungkook muy interesado.

— Mmmmmm Nahh, son lindos y todo pero no estaría con uno. — Dijo mirando la televisión.

Jimin bajo sus orejitas por la tristeza.

Hoseok notó eso y lo acarició y entonces Jimin volvió a alzar las orejas.

Jimin estaba agradecido de tener un dueño como Hoseok que siempre lo consolaba y mimaba.

— Muchas preguntas y poco avanze, a trabajar caballeros. — Dijo Jungkook agarrando la laptop.

Pasaron unas cuatro horas y avanzaron con la gran parte del proyecto.

Namjoon y Jungkook se despidieron de Hoseok y salieron de su departamento.

Jimin dejo de ser huron y se transformo en humano y miro hacia la puerta.

— Bueno ya se fueron nuestros invitados, Taehyunggie deja de jalarle la cola a Yoonnie. — Reprendió Hoseok.

Hoseok abrió los ojos en grande.

— ¡¿Taehyunggie!?

Jungkook y Namjoon salían del departamento del rubio.

— Es raro, siento mi mochila más liviana. — Dijo Jungkook haciendo una mueca de confusión.

— Y yo siento que no tengo mochila. — Namjoon sonrió y después paro de caminar.

Jungkook y Namjoon se miraron al mismo tiempo.

— ¡Mierda! — Gritaron ambos y corrieron de regreso adentro del departamento.

Hoseok aún miraba por la ventana para ver si Jungkook y Namjoon se diganaban a regresar.

— Esos chicos son unos estúpidos. — Dijo el rubio negando.

De pronto tocaron el timbre repetidas veces.

— ¡Carajo me van a reventar los oídos! — Grito Hoseok abriendo la puerta.

Jungkook entro al departamento y busco con la mirada a Taehyung hasta que vio a la ardilla que lo miraba con sus patitas cruzadas.

Aparentemente molesto.

— Taehyunggie perdón me olvidé. — Sonrió y cargo a la ardilla para llevársela.

Mientras tanto Namjoon agarró su mochila para irse, pero algo en la cocina le llamo mucho la atención.