抖阴社区

Capítulo 12

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El viaje hacia la aldea de Kisaragi fue largo, pero logré llegar sin incidentes. La luna se alzaba en lo alto, iluminando las calles desiertas con su pálida luz. No se veía un alma en la aldea, lo que solo podía significar una cosa: el miedo se había apoderado de los aldeanos.

Avancé con cautela, observando cada rincón en busca de algún rastro del demonio. Según la información del cuervo mensajero, las víctimas habían desaparecido sin dejar rastro, y sus cuerpos solo eran encontrados días después, drenados por completo de sangre.

El viento soplaba con fuerza, agitando las ramas de los árboles y haciéndolas crujir. Mis sentidos estaban en alerta máxima.

Entonces, lo sentí.

Un escalofrío recorrió mi espalda cuando el olor a sangre fresca impregnó el aire.

Me deslicé en silencio entre las casas, siguiendo el hedor. Finalmente, giré en una esquina y vi una escena que me hizo apretar los dientes.

Un cazador de demonios, cubierto de heridas, jadeaba en el suelo, sosteniendo con dificultad su espada. Frente a él, una silueta oscura se alzaba con un aura amenazante. El demonio tenía un cuerpo delgado, piel pálida y unos ojos amarillos brillantes que resplandecían en la oscuridad.

— Tienes agallas, humano — siseó el demonio, relamiéndose los labios ensangrentados. — Pero eso no es suficiente.

El cazador intentó levantarse, pero su cuerpo no respondió.

Mis músculos se tensaron.

No podía permitir que muriera.

Apreté la empuñadura de mi katana y corrí hacia el demonio, blandiendo mi espada.

— ¡Respiración del Viento, Segunda Forma: Garra de Tormenta Cortante!

Liberé un torbellino de cortes con mi ataque, dirigiéndolos hacia el demonio. La criatura giró rápidamente y esquivó algunos, pero no todos. Un corte profundo apareció en su brazo derecho, haciendo que soltara un gruñido de dolor.

— ¿Otro cazador? — murmuró con una sonrisa torcida.

Me interpuse entre él y el cazador herido, manteniendo mi postura firme.

— No pienso dejar que sigas matando a más inocentes.

El demonio me observó con detenimiento antes de soltar una carcajada escalofriante.

— Qué interesante... Veamos cuánto puedes durar.

Se lanzó contra mí con una velocidad increíble. Apenas tuve tiempo de reaccionar antes de que sus garras se dirigieran directo a mi cuello.

— ¡Maldición!

Levanté mi katana justo a tiempo para bloquear su ataque, pero la fuerza me hizo retroceder varios pasos. El demonio no perdió tiempo y atacó de nuevo, lanzando un golpe feroz hacia mi abdomen.

Salté hacia atrás, evitando el impacto por los pelos, pero en ese instante escuché un sonido sordo.

Me giré justo a tiempo para ver al cazador herido desplomarse en el suelo.

— ¡Oye, resiste! — grité, intentando acercarme a él.

El demonio aprovechó mi distracción.

En un abrir y cerrar de ojos, ya estaba sobre el cazador.

— No...

Mi respiración se detuvo cuando vi cómo sus garras perforaban el pecho del cazador. La sangre salpicó el suelo, tiñendo de rojo la tierra.

La maldición de quererte | ????? ??????Donde viven las historias. Descúbrelo ahora