抖阴社区

                                    

Abandonó su agenda y se vistió para dormir. Era temprano pero debía descansar. Ya había decidido ir al Centro Mortimer al día siguiente.
Porque tal vez, mientras más pronto se dedicara de nuevo a su trabajo, más pronto podría olvidarse de la emoción que despertó en ella el reciente caso.
                    〰〰〰〰〰〰
Se levantó justo a tiempo y se arregló. Bajó a la sala de estar y no vió a Sherlock por ninguna parte.
Se encaminó a la cocina dispuesta a encontrar algo de desayunar pero no sentía apetito de ojos humanos así que bajó hasta la cocina de la señora Hudson.
Espero que no se los haya sacado a alguien vivo, pensó mientras bajaba los escalones.

La amable señora ya estaba despierta y preparaba su desayuno.

  - Buenos días señora Hudson.

  - ¡Buenos días Joan!

  - Quería preguntarle... ¿Sería demasiada molestia si pudiera dejarme usar su cocina y tomar de sus alimentos? Sherlock no tiene nada... que pueda comerse sin ser canibalismo.

  - ¡Pero por supuesto querida! Y, lo sé, Sherlock tiene un desastre allí. Lo juro, ¡esa cocina se esta convirtiendo en una morgue!

  - Gracias.

Después de un agradable desayuno con la parlanchina señora Hudson, Joan se encaminó al Centro Mortimer que quedaba a poco más de cinco minutos.
El edificio del Centro era modesto y aún estaban terminando con algunos detalles de la decoración.
Entró y se encontró con una señora de cabello rubio canoso y de lentes redondos. La recibió con una expresión de sorpresa:

  - ¡Doctora Watson!

  - Sólo Joan, por favor. Usted debe ser la señora Lisa Down ¿no?

  - Asi es doctora... digo... Joan. -cambió su sonrisa por una expresión de aflicción y continuó- Lamento mucho su pérdida. Acordamos que tendrías una semana libre, ¿que haces aquí?

  - Lo sé y... gracias, de verdad. Pero creo que el trabajo me hará sentir mejor.- replicó Joan tratando de que el tema de la falsa muerte de su abuela se esfumara.

  - Eso está bien querida. -Lisa sonreía con simpatía.

Horas mas tarde Joan se reunía con Henry Campbell, un hombre de 28 años que recientemente había tenido una recaída. Iban en el auto de él camino a su trabajo.

  - Señorita Watson...

  - Sólo dime Joan.

  - Bien, umm... Joan, creo que te vas a aburrir en mi oficina. Deberías, no sé, dar una vuelta por los alrededores mientras yo estoy en el trabajo. No tardaré mucho... de todos modos me han permitido trabajar sólo por un par de horas. Si me das tu número de teléfono yo podría llamarte en cuanto salga.

  - Henry, no tienes que preocuparte por mí.

  - Lo sé. Entiendo que no puedes dejarme solo pero... bueno, al menos puedo hacer que alguien te haga un recorrido por las instalaciones. Hay muchas cosas interesantes sobre la nanotecnología. Y cuando termine con mi trabajo te llamaré y nos iremos.

  - Confío en ti Henry. No quiero que sientas que soy tu vigilante o algo así. Pero está bien, te daré mi número...-se palpó los bolsillos en busca de su teléfono, cuyo número aún no había memorizado- No puede ser.

You can't solve me (SherlockBBC/Joan WatsonCBS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora