Cuando llegaron a la casa ninguna había menciomado nada al respecto, lo que Lonnie les había dicho seguía en la cabeza de Adora y ella no sabía que iba a hacer ahora.
Hace algunos años, cuando ella recién había entrado al FBI dedico mucho de su tiempo para encontrar la verdad respecto a Mara.
Busco y siguió buscando hasta que por fin descubrió la verdad, la Horda había matado a su hermana. Fue uno de sus hombres el que había tratado de retener a Catra y quién había disparado el arma que terminó con la vida de su persona favorita.
Desde el momento en que lo supo había dedicado todos sus recursos y energía para atraparlos, pero nunca lo logro, sus líderes tapaban todos sus flancos de manera perfecta.
Cada pista terminaba como un callejón sin salida.
Ella sabía que Sharon Weaver y Hordak no eran las mentes más brillantes del mundo, pero en cada operación cuidaban todos los detalles, y jamás salían implicados en nada, incluso Adora y su equipo habían logrado atrapar a algunos de sus cómplices y nadie los quiso delatar.
Se esforzó tanto que su jefa la hizo dejar el caso por pura salud mental, aunque ella nunca supo la verdad al cien por ciento.
Con el tiempo, Adora intento dejarlo ir, fue con la doctora Star y ella le ayudo a superar en cierta medida lo que pasó. Incluso logro ponerlo en una cajita muy muy chiquita dentro de su cabeza, una que no abría con regularidad.
Pero a decir verdad aún había muchas preguntas sin resolver cómo ¿por qué? ¿Qué ganaban? Cuando Mara estaba viva había trabajado con la Horda un par de veces, y siempre había salido bien. Los robos habían sido perfectos y las ganancias millonarias. Entonces ¿por qué uno de sus hombres le disparó? Ellos la conocían, sabían quién era, como se veía.
Para Adora estas preguntas sin respuesta eran como una luz en su cabeza, una que nunca encendia porque cuando lo hacía brillaba tan fuerte que cegaba todo lo demás.
“Adora, ¿Estás bien?” Era bastante obvio que no lo estaba, se había vuelto una bola en el sillón y tenía las manos sobre la cara, apenas respiraba y su cabeza le decía que experimentaba los primeros síntomas de un ataque de pánico. “Adora respira, por favor.”
Catra la había tomado por los hombros pero ella no podía sentir del todo sus manos. “Vamos Adora, cuenta, uno, dos, tres.”
Adora lo repitió suavemente uno, dos tres. Poco a poco pudo sentir como lo que sea que presionaba su corazón se iba disipando y sin saber cómo empezó a llorar.
“Ven Adora, vamos a que te acuestes, tranquila, estás bien, estas segura.” Con mucho cuidado Catra le ayudo a levantarse y a subir las escaleras, Adora estaba segura que parecía un costal sin forma pero no tenía la fuerza suficiente para hacerlo ella misma.
Cuando llegaron se sentó sobre la cama, no sabía cómo pero ya no caían lágrimas, aún así apretó la mano de Catra más fuerte, con una petición tacita para que no se fuera. La morena lo entendió y se quedó junto a ella.
Cuando Adora abrió los ojos afuera ya estaba obscuro, se había queda dormida sobre el regazo de Catra; poco a poco se incorporó y la vio a los ojos.
“Hey Adora, ¿Cómo te sientes?” dijo con un tono mucho más suave del que usaba usualmente para cualquier persona.
“Ellos, la Horda, ellos mataron a Mara.” Su voz salió en un pequeño susurro, enserio quería contárselo y que así entendiera un poco porque todo este show.
“Lo sé.” ¿Lo sabe? ¿Cómo es que lo sabe? Catra pareció entender la pregunta en sus ojos porque continuo. “Después de que, ya sabes te fuiste, yo también busque respuestas. Mara me salvó y yo solo quería entender que habíamos hecho mal ese día.”

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Let's go again | AU | Catradora.
FanfictionAdora no ha visto a Catra desde que tenían 19; tiene una vida diferente llena de nuevas personas y responsabilidades. Pero ?que pasa cuando Catra corre peligro y la única que puede ayudarla es Adora? Ambas tendrán que enfrentar dolores pasados par...