Los hermanos Swiketsky ingresan por el portón principal de la escuela, para acto seguido voltear y despedirse de su padre con un pequeño saludo con la mano, recibiendo un gesto similar por parte del doctor, aunque esto fue de unos pocos segundos ya que el hombre debía manejar al hospital. Tom se quedó unos pocos segundos viendo como su padre se aleja en el vehículo, mientras que su hermana empieza a dirigirse por su cuenta al área de primaria, una iniciativa que tomo por voluntad propia desde que se reanudaron las actividades escolares tras el receso invernal ya hace una semana. El joven de cabellera rubia soltó un pequeño suspiro, y tras esbozar una pequeña sonrisa decidió dirigirse a su salón de clase, ya que al ver a su hermana menor tomar este tipo de iniciativas, a pesar de que esto ya lo ha visto y experimentado en numerosas ocasiones, de diferentes maneras, aunque es la primera vez que siente una gran disfrute al verlo.
-¿Por qué me siento así?- se cuestionó el hijo del doctor Swiketsky a sí mismo, al intentar tranquilizarse y buscar una explicación, dándose cuenta de un pequeño patrón que ha tenido en los últimos meses con respecto en su comportamiento, cosas que no ha hecho nunca-
Por mucho que quisiera tomarse unos minutos para organizar estas extrañas ideas que lo estan confundiendo, debe ir a su aula ya que este día no tiene mucho margen de tiempo, aunque es muy seguro que aproveche el tiempo libre que tenga durante el día, ya que por alguna razón no está conforme con esta nuevas inquietudes que tiene actualmente. Tras caminar cinco minutos el mayor de los hijos del doctor Swiketsky ingreso al edificio destinado al nivel secundario, como siempre el encargado de seguridad seguía pedido en su teléfono ignorándolo completamente, aunque se llevó una pequeña sorpresa al ver a Marcos y Camila esperándolo en el entrepiso junto a las escaleras, en especial al ver a su amiga pelirroja. Tom subió los escalones rápidamente quedando frente a frente con sus amigos en el entrepiso, Marcos posee una gran sonrisa, mientras que Camila se encuentra algo nerviosa, ya que desde el día que el joven de cabellera rubia evito que tomase una terrible decisión, no han podido comunicarse directamente, ya sea por nuevos tratamientos que empezó a recibir, ademas de un sobre apego de su padres que no había recibido desde hace mucho tiempo, esto fue la principal razon por la que no asistió a la primera semana de clases, aunque ya sus padres notificaron a la institución de lo ocurrido, pero en estos momentos la pelirroja se siente avergonzada por no haberse comunicado una sola vez con el hijo del doctor Swiketsky.
-Supuse que si vendrías esta semana, me alegra de verte Camila- mencionó Tom con un tono tranquilo, mientras que una pequeña sonrisa decora su rostro.
Estas palabras junto a la pequeña sonrisa tomaron por sorpresa a la pelirroja, quien no esperaba esto por parte del hermano mayor de Martina Swiketsky, pero no pudo corresponder a sus palabras debido a la interrupción del joven de cabellera oscura –Yo también me alegro de verte Tom... gracias por preocuparte- mencionó Marcos de forma burlesca, mientras se ríe un poco de la cara de confusión del rubio. Por alguna razon Camila empezó a reírse siendo seguida por Marcos, causando más confusión en Zokial, ya que el solo saludo primero a su amiga, para luego recibir un comentario sarcástico de su amigo, pero ahora ambos estan riéndose de la nada, aunque esto no le molesto en absoluto, en realidad provoco que una pequeña sonrisa se dibuje en su rostro, la cual se desvaneció rápidamente al percatarse de hay algo rondando por los alrededores de la edificación, aunque se oculta de forma sobresaliente, ya que Tom no está logrando localizarla. Ambos amigos al notar la seriedad en el rostro del joven de rizos dorados creyeron que la broma no fue de su agrado, por lo que de forma repentina lo abrazaron para tratar de incomodarlo un poco más, ya que ante su perspectiva una criatura de muchos años de molesto por un chiste de dos adolescentes, el no reírse de solo pensarlo en un gran error, el hijo del doctor Swiketsky no tuvo más remedio que intentar seguir el juego de sus dos amigos, ya que aún sigue tratando de localizar al ente desconocido.

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Demon God: The Protector
FantasyUn antiguo ser de miles de a?os, habita entre los humanos actualmente bajo el nombre de Tom Swiketsky, quien intentará vivir una vida como un estudiante de secundaria normal, pero su identidad pende de un hilo, por culpa de criaturas que de alguna f...