Aventura inesperada (Julieta Madrigal x Lector)

-¡FELIX!

-¡¡ESTAS CON JU--PHHMMFFG!!

-Felix cállate o te van a oír, ¡cierra la puerta y espera afuera!

-Pero Pepi, ¡Amor!

-No seas chismoso ¡Sal!

-Luego me cuentas todo. - Le susurro fuerte Felix al oido de Pepa.

-¡Felix! - Pepa le cerró la puerta en la cara y su esposo se quedó como guardián por si alguien venia.

-Pepa, puedo explicar--

-¡Te revolcaste con mi hermana! ¿En qué estabas pensando?

-¡No fue así, ella es significa mucho mas para mi que un simple revolcón!

-T/n vístete, Agustín no esta de humor hoy y tenemos que pensar en que coartada darle a Julieta. Estuvo buscándola toda la mañana.

Julieta no decía nada.

-Julieta, querida ¿estás bien?

-¿Hermana? - Julieta comenzó a llorar.

-¿Qué le hiciste?

-¡Nada malo! ¡Te lo juro!

-Sal de aquí y di que estabas en el pueblo, yo pensare en algo, ¡que no te vean! - La nube de Pepa me dio miedo, habían rayos y no quería que me golpee uno. - ¡YA VE!

Salí del cuarto y al verme con Felix me avergoncé así que baje la cabeza y me escape por la ventana de la cocina.

-¡Ay no puede ser! de todas las personas. Aunque creo que es mejor a que Agustín nos haya encontrado, ¡o los niños! ¡Ay no! okay todo esta bien. No espera, ¡NADA ESTA BIEN! Mi Julieta, mi querida, ¿por qué lloró? ¿se habrá arrepentido? Hay santos buñuelos que voy a ha-- ¡Ouch! - Tanto hablar y correr sin ver por donde iba me llevó a un extremo del Encanto y me choqué con un árbol. - Mejor me quedo aquí un rato, fingiré que... ¡escribo, sí! Ay no pero mi diario está en mi habitación, bueno será momento de reflexión.

Pasaron un par de horas mas o menos, estaba mirando las hojas del árbol y pensando en lo que había pasado, no me arrepiento, fue el mejor momento de mi vida.

-¿Qué estas haciendo aqui?

-¡Luisa! Hola, ¿qué haces tu aquí?

-A veces vengo aquí a descansar después de ayudar al pueblo.

-Wow ¿tan tarde es? Me perdí el almuerzo.

-Sí, pero aun hay comida, puedes ir y mi madre te servirá algo.

-¿Cómo esta ella?

-Bien, muy bien en realidad, no la había visto sonreír tanto como hoy.

-¿En serio? Me alegra. No sabes cuanto.

-¿Me dirás qué paso? porque tu también no parabas de sonreír ahora que te encontré. ¿En qué estabas pensando?

-Pues sobre lo que me dijiste, sobre halar acerca de mis sentimientos, yo...

-¿Hablaste con mi mamá de eso verdad?

-¡Sí! ¡lo hice! y su respuesta fue...

-Positiva.

-¡Exacto!

-¡No puede ser! Me alegra tanto, no sabia que mi madre lo tomaría tan bien, aunque creo que siempre lo supe. Ahora solo te falta mi padre.

-Agustin, ¿por qué Agustín? No es algo fácil, ademas debería hablar con Julieta primero.

-No seas tímida. - Luisa tomó mi mentón y elevó mi mirada para encontrarse con la de ella. - Todo saldrá mejor de lo esperado, te estaré esperando. - Me dio un suave beso en la mejilla.