T E R M I N A D A [P A R T E U N O]
Cuando la experimentación se sale de control todo se vuelve un caos, hay muerte, desesperación y conflictos internos.
Cuando un virus muta y comienza a acabar con la ciudad poco a poco un grupo de estudiante...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿De qué crees que hablen? —Observé a los demás que estaban en un círculo confidencial. Todos, menos Finn y yo que estábamos en nuestra burbuja de amor.
—Ni idea, parece que planean algo —respondí sin mucho interés y después apreté los labios.
—¿Y qué crees que planean? —insistió mirándome y sonreí ligeramente.
—No lo sé —repetí levantando las cejas—. Estamos muy lejos como para oír algo.
Lo vi asentir lentamente y después me miró sonriendo así que hice lo mismo entrelazados los dedos de mis manos.
—¿Qué? —Solté una pequeña risa por su expresión.
—Nada —Volvió a mirar al frente y después me miró de reojo.
—Dime, ¿Qué? —insistí una vez más mientras sonreía y él se encogió de hombros.
—¡Cuando quieran pueden unirse! —Ambos nos giramos a ver a Millie cuando nos llamó.
Intercambiamos sonrisas para después levantarnos y acercarnos a los demás que llevaban minutos hablando.
—Pues llevan hablando de forma conspiratoria por más de cuarenta minutos —nos excusó Finn y asentí dándole la razón.
—¿Y no pudieron venir antes? —cuestionó Sadie y tomé aire por paciencia—. ¿Tenían que quedarse sentados durante tanto tiempo?
—Mejor cierra la boca Sadie —La señalé con mi índice molesta y oí la risa de Aidan, pero decidí ignorarlo.
—¿De qué hablaban? —preguntó Finn apoyando sus manos en la mesa.
—En cómo podemos salir de aquí —respondió Noah pasándose una mano por el cuello—. No vamos a quedarnos aquí hasta morirnos, además no han enviado ni un helicóptero por aquí.
—Tal vez creen que ya nos morimos —respondió Edén y tragué saliva por esa posibilidad.
—No me sorprendería —confesó TJ mirando a la nada—. Si no damos señales de vida cómo pretendemos que vengan a salvarnos.
—¿Y por qué no llaman a emergencias? —sugirió Chloe y la miramos.
—Ya lo hicimos, nos creen locos —respondió Jack con amargura.
—¿Y si volvemos a llamar? —Aidan me miró y suspiré pesadamente, con intentar no perdíamos nada.
—De acuerdo —Saqué mi celular del bolsillo y llamé a emergencias.