Feelings; Wenclair

Steve había estado cancelando los entrenamientos por no poder supervisarlos, o a veces simplemente los ponía a lanzar el balón a la canasta, algo que ya tenía harto a todo el equipo, el equipo de la academia Winters eran demasiado buenos, y si no ganaban, adiós a las semifinales y por ende, a la posibilidad de ganar el campeonato.

—Steve, debes elegir a un nuevo capitán, es necesario, seguiremos perdiendo entrenamiento y no estaremos listos.— Reclamo Max, apoyada por todo el equipo.

—Max tienen razón Steve, necesitamos seguir entrenando o adiós a la oportunidad de volver a ganar.

—Lo se Wednesday, pero me da miedo dejarlos.—Confeso.

—Stevie, nos podemos cuidar solos, no somos tan idiotas— ánimo Robin.

—Si Steve, además, necesitas estudiar para tus exámenes y, bueno, ya en unos meses te gradúas, necesitamos elegir a alguien nuevo.— Apoyo Xavier

—Bien, entendí, está bien, ustedes ganan, hoy los examinaré y mañana diré quién está listo, ahora, vayan a esa cancha y denme diez vueltas.— Dijo señalando el lugar— ¡Ahora!— Todos acataron la orden y comenzaron a correr alrededor.—Vamos, vamos, más rápido, ¿Es lo único que pueden correr? ¡Rápido muchachos!— La velocidad aumento y tuvieron que empezar a correr más, Steve estaba presionandolos y quién se quedará atrás tenía que hacer dos minutos de plancha, era insoportable.— Bien todos, sin descanso, hagan una fila enfrente de mi— Pidió con tres balones en las manos.—Bien.— Lanzo el balón a tres integrantes— Ustedes tres, uno en cada esquina, los demás en medio.—El agarro otro balón y se puso en la esquina sobrante— A la cuenta de tres, con ayuda de el lanza pelotas 4000, y nosotros cuatro lanzaremos pelotas contra ustedes, si no las esquivan recibirán un balonazo, quien atrapé el balón puede tirar a la canasta, si te golpea fuera, ¿Han entendido?— Todos asintieron mientras se dispersaban por la cancha.

El juego comenzó, el disparador de pelotas estaba al máximo lanzando demasiados balones, más los que estaban lanzando los otros era algo difícil, pero no imposible.

Como era de esperarse Max, Wednesday y Robin eran las que más lo lograban, también Xavier, el cual parecía no estar tan cansado.

Ya la mitad había sido eliminado, de ocho, solo quedaban ellos cuatro.

—Esto, es, divertido, ¿No?— pregunto agitada

—Creo, que, mi yo, de otro universo, acaba de vomitar. —Dijo al sentir su estómago revolverse.

—¿Hace calor? Tengo calor.— Dijo Robin parando para descansar tantito, pero recibió un balonazo que le termino por sacar el aire.

—Ayuda, chicas, ¿Como?, ¿Como aguantan?— Pregunto el castaño entre jadeos.

—¿Ya se cansaron?, Si abandonan el juego todos recibirán dos balonazos a toda potencia del lanza pelotas.—Amenazo señalando la máquina.

—¡Te odio Steve!— Gritó Wednesday y el chico se empezó a reír.

—Yo también me amo.— Hablo como respuesta.

Siguieron esquivando pelotas por unos diez minutos más, ya la mayoría de los eliminados también les estaban lanzando, pero, no sé rendían, Xavier, quien había logrado sobrevivir, estaba apunto de caer al piso, Max se cayó dos veces de las cuales se salvó de recibir un balonazo y Wednesday, bueno, ella hacía todo tipo de maniobras y movimientos de parkour  para evitar las pelotas.

—¿Se rinden?— Pregunto Steve esperando que por fin acabarán

—¡Ya cierralo y desaparecete Steve!

—¿Este es mi fin?—Xavier se distrajo por unos segundos y pum, balonazo en la cara y literalmente, para el piso,se cayó hacia tras, apenas y se sostuvo con las manos.