Charlotte Elliot el mayor karma de un mafioso, es su peque?o castigo disfrazado de angel y una chica demasiado difícil para el líder de la mafia.
El pago de una apuesta ganada.
El amor no se conoce como nos lo pintan en las novelas, aveces un cruce...
— vamos a la casa de la familia de Charlotte- me subí al auto.
— entendido señor- Leon se subió y encendió en auto.
Le quería decir a su familia que ella estaba bien y que podrían ir a verla.
— ¿La señorita sabe que va a casa de su familia?- comenzó a conducir.
— no, quiero que sea una sorpresa cuando los vea- saque un cigarro y comencé a fumar.
— si sigue fumando así sus pulmones no van a aguantar mucho tiempo, señor.
— lo sé, lo se- segui fumando igual.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿Y esos dos hombres?- estaciono el auto.
— ¿Cuáles hombres?- me asome un poco.
Dos hombres vestidos de negro sirvieron a un auto y se fueron.
La puerta de la casa estaba abierta.
<<Carajo>>
Bajé del auto y Leon también detrás de mi, armado.
— cuida la entrada- saque mi arma y me asome a la casa, vi los cuerpos de su familia.
— están muertos señor- revisó el pulso de la madre y el hermano de Charlotte.
— por un carajo- guarde mi arma y me agache a un lado de su padre.
Escuché un pequeño susurro salir de su boca.
— ¿Tu?... "León"- me vio con los ojos entre cerrados.
— si, soy yo- lo levanté un poco recargandolo en la pared.
— ¿Cómo... Cómo está mi hija?
Le quedaban pocas fuerzas para poder hablar antes de morir, se estaba desangrando por los tres disparos que tenía en el cuerpo.
— bien, ella está muy bien.
— ¿Que le hiciste a mi hija?
— nada, solo la eh cuidado.
Comenzó a tocar y escupir sangre de su boca.
— lo llevaré a un hospital- lo iba a cargar pero el me interrumpió.
— no, no se puede hacer nada.
— pero, Charlotte se pondrá mal- lo tome en brazos sin importar que me manchar de sangre mi ropa- Leon, pide refuerzos.
— "León" solo... Promete que la cuidaras, prométeme que Charlotte estará bien.
— lo prometo- camine hacia la entrada pero el murió en mis brazos.
<<No,no,no>>
— ¡Señor!
Lo puse en el suelo.
— dile a los refuerzos que traigan tres ataules- le cerré los ojos al padre de Charlotte.
— lo prometo, charlotte estará bien.
Mi mayor preocupación era el cómo le diría a Charlotte que su familia estaba muerta.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Un doctor se encargo de retirar las balas de sus cuerpos y las guarde en un pequeño frasco, tres disparos a cada uno.
Me acerque al ataúd del pequeño, parecía tener unos doce años o no más de quince.
— ¿a dónde los llevamos, señor?
No podíamos llevar los cuerpos a la mansión.
— a la bodega.
No era un lugar decente o formal pero era donde al menos Charlotte se podría despedir y después los enteraríamos en el cementerio cómo se deberia hacer.
— entendido.
Tenía en mis manos una nota que había encontrado en el cuerpo de su madre.
"CUIDALA O ELLA TAMBIÉN VA A TENER EL MISMO DESTINO"