The Broken Sword: A Way Forward

Miedo.

Eso era lo único que podía observar en los ojos del animal herido bajo sus pies el cual tenia varios cortes superficiales.

Tratando de endurecer su corazón lo más posible levanto la espada en su mano listo para acabar con esto, bajando a una gran velocidad hacia el cuello del animal que chillo una última vez.

Pero la espada se detuvo a unos pocos centímetros del cuello.

Lleno de una gran frustración por sí mismo se alejo un poco del animal tirando su espada al suelo para empezar a quejarse por no tener el valor para hacer su cometido, mientras que el animal reuniendo un poco de fuerzas logro recomponerse y empezo a escapar lo mas rápido que pudo pero cojeando cada cierto tiempo.

el hombre, el cual no aparentaba ser más viejo que un joven adulto de 20 años,empezó a murmurar cosas para sí mismo.

Habían pasado 6 años de entrenamiento donde esforzó hasta lo que su cuerpo podía soportar, desde el amanecer hasta el atardecer no paraba de entrenar su técnica con la espada y fortalecer su cuerpo, había logrado varias avances en ese tiempo comparado a como era al empezar, pero nunca había podido superar su debilidad que lo haría inutil como un guerrero en el campo de batalla.

No tiene el valor para matar

Simplemente no puede, no lo sabe con certeza que es ese sentimiento  pero siempre cuando esta por lograrlo los ojos de los animales salvajes  con los que entrena logran hacerlo dudar, ver esos ojos de puro miedo queriendo vivir con cierto agregado de algunas emociones en diferentes grados dependiendo del animal , logran darle un golpe directo en su ser y termina dejándolos huir, se ha ganado varias reprimendas de sus maestros pero nunca ha logrado superar eso, sino fuera uno de los hijos del rey seguramente ya lo habían hechado de los campos de entrenamiento hace un buen tiempo.

 Pero mientras el joven adulto seguia pensando para sí mismo otra persona de su misma edad que parecia estar tratando de llamarlo  se estaba acercando corriendo  pero el joven hombre  no la noto hasta que llego a su lado.

—Hevel...por...fin...te... encontre...no...sabes.... cuanto...te...he...buscado— dijo el recién llegado jadeando, no parecía tener una buena condición física.

—¿Qayin, por que me buscas?— dijo, bastante sorprendido—¿no deberias estar ahora mismo en la biblioteca estudiando eso del Anter?.

—Se llama eter, hevel— Dijo corrigiendo con cierta irritación—Pero eso no es lo importante,es sobre padre, va a dar un mensaje importante y quiere vernos ahi.