?Es omega! ; gadri

Los periodos de celo omega son momentos de gran tensión y vulnerabilidad para quienes son víctimas de ello. Aunque cada uno los atraviesa de manera diferente, algunos síntomas son comunes: la necesidad excesiva de aparearse, el deseo de permanecer en un lugar seguro, o la búsqueda de compañía, ya sea de su pareja o de algún miembro de su manada. También se volvían excesivamente irritables si sus nidos no cumplen con las condiciones adecuadas o si no se alimentan de alimentos dulces. Ha aprendido todo eso y más sobre los omegas desde que sale con Pablo, Pedri podría escribir un libro sobre cómo exactamente un omega no debería pasar su celo con solo basarse en lo que Gavi hace cuando lo atraviesa.

Por lo general, los omegas solicitan permisos especiales para pasar sus celos en casa, y las empresas u organizaciones, sin importar cuáles sean, siempre los conceden. En cambio, el permiso para el celo de los alfas es más difícil de obtener, justamente porque los omegas están en mayor peligro durante esos periodos. Eso es algo que Gavi no parece entender. Pedri entra en un estado de ansiedad pura cada vez que sabe que su omega está en celo y, aun así, sigue acudiendo a los entrenamientos, jugando partidos y, lo peor de todo, conviviendo con otros alfas.

Gavi le aseguraba constantemente que se preocupaba demasiado, que con los supresores y una dosis extra de pastillas nadie lo notaría, y puede que tuviera razón, pero eso no servía para calmar los nervios de Pedri.

Recuerda en especial una ocasión cuando el equipo volaba de regreso a Barcelona después de un agotador partido de la Champions League. El resultado había sido positivo y por ello el ambiente era agradable. Los jugadores estaban relajados, bromeando entre ellos y revisando sus teléfonos, totalmente ajenos a la turbulencia del avión. Sin embargo, Gavi, sentado a su lado, era un caso distinto: su cuerpo se mantenía tenso, con las manos aferradas a los apoyabrazos, y lo más revelador de su estado era que le había pedido a Pedri la manta con la que se tapaba. De por sí que Gavi le pidiera algo ya era extraño, pero ¿algo con su olor? Sin duda ambos sabían muy bien lo que estaba sucediendo.

El omega mantenía la manta sobre sus piernas y la frotaba contra las glándulas olfativas de sus muñecas cada cierto tiempo, evitando la mirada de Pedri cada que podía.

Pedri sabía exactamente la razón de ese comportamiento: su celo. Desde que supo que la fecha del partido coincidiría con el celo de Gavi, había estado inquieto. Sabía que el omega no querría perdérselo por nada del mundo, ni siquiera si los efectos del celo eran demasiado fuertes. Y ahí estaba, prácticamente temblando en su asiento, actuando como un pequeño cachorro.

⸺Te dije que las pastillas no serían suficientes ⸺regañó.

Pablo lo volteó a ver de inmediato, con el ceño fruncido y claramente enfadado por el comentario.

⸺¿Qué? ⸺espetó con tono cortante.

Pedri arqueó una ceja, ligeramente divertido. Su enfado solo podía deberse a su vulnerabilidad.

⸺¿Vas a negar que preferirías estar en tu nido ahora mismo en lugar de en este avión?

Era imposible que Gavi lo negara. Su instinto probablemente estaba alterado por no encontrar un lugar seguro donde refugiarse. Estar en un avión, en movimiento y lejos de su hogar, lo hacía sentirse ansioso e inseguro. Pedri lo conocía bien. Sabía que su omega no podía estar tranquilo porque no se sentía seguro.

⸺No estoy de humor, Pedro ⸺gruñó Gavi.

Pedro sonrió.

⸺Puedo notarlo...

Gavi abrió la boca, a punto de responder algo hiriente, pero se detuvo de inmediato cuando el avión se sacudió con fuerza debido a una turbulencia. Pedri observó cómo el cuerpo del omega se tensaba, quedándose completamente quieto y aferrándose aún más a los apoyabrazos. Sus ojos abiertos reflejaban puro miedo. Aunque la turbulencia cesó en segundos, Gavi seguía respirando agitadamente, mirando a su alrededor como si estuviera a punto de tener un ataque de pánico.

⸺Hey, Pablo, está-

No pudo terminar de hablar porque Gavi se inclinó rápidamente hacia él, como un gatito buscando refugio, y comenzó a frotar su rostro contra la glándula olfativa de su cuello. Pedri se quedó inmóvil, dejándose hacer mientras el omega presionaba su rostro contra su hombro y cuello, cubriéndose con su aroma. Era un gesto instintivo, casi desesperado. Pedri tuvo que morderse la lengua para no hacer algún comentario inoportuno. Odiaba ver a Gavi asustado, pero también sentía frustración porque él mismo se ponía en esas situaciones. Pedri le había insistido en que se quedara en casa, pero Gavi, terco como siempre, simplemente no le hizo caso.

Era increíblemente testarudo y no parecía ser consciente de los peligros a los que se exponía... y, aun así, Pedri lo amaba con todo su ser.

⸺Está bien, Pablo ⸺susurró, pasando un brazo por los hombros del omega para que pudiera acomodarse mejor contra su cuello⸺. Llegaremos a Barcelona pronto, no te preocupes.

Gavi asintió contra su cuello y Pedri lo abrazó con fuerza, tratando de transmitirle todo el calor posible. Poco a poco, la ansiedad del omega se disipó, reemplazada por una sensación de calma y complicidad.

⸺Uy, la parejita ⸺se escuchó la voz burlona de Ferran desde los asientos delanteros. El beta los observaba con una sonrisa mientras Fermín los grababa⸺. Deberían buscar un lugar más privado.

Pedri no pudo evitar sonreír. Justamente por reacciones como esa evitaban demostrar su cariño frente a los compañeros. Siempre eran insoportables. Sobre todo Ferran, que quería hacerse el gracioso y terminaba metiéndose donde no debía.

Lo más divertido era que ninguno de los otros alfas parecía darse cuenta de la obviedad de la situación. Gavi estaba completamente acurrucado contra él, presionándose contra su aroma y cubriéndose con él, comportándose de la forma más omega posible, y aun así nadie sospechaba. Era demasiado gracioso.

⸺Bueno, me suena a que estás celoso ⸺respondió Pedri, acariciando el cabello de Gavi, quien se había escondido en su cuello para ocultar su evidente sonrojo⸺. Desde que tu novia te dejó, estás cada vez más entrometido. Tal vez deberías empezar a buscar citas.

Ferran chasqueó la lengua cuando todos se rieron, y poco después la atención se dispersó. El viaje continuó mientras Gavi se relajaba en los brazos de Pedri, su respiración volviéndose más tranquila y dejando de temblar.

Cuando Gavi alzó la mirada con sus bonitos ojos marrones, Pedri le sonrió.

⸺¿Te sientes mejor?

Gavi asintió tímidamente, sin apartarse y sin pronunciar palabra. Se notaba claramente afectado por su celo, y Pedri no podía pensar en otra cosa más que en llevarlo a casa y cuidarlo como se merecía. Como no podía hacerlo en ese momento, ajustó su brazo sobre los hombros de Gavi y lo dejó olfatearlo.

⸺Ya casi llegamos ⸺susurró, besando su cabello.

Gavi asintió lentamente.

Pedri sintió cómo finalmente se relajaba entre sus brazos y cerraba los ojos, dejándose cuidar.

...

El próximo será el último capítulo y los chicos del Barca finalmente sabrán que Gavi es omega. El spoiler es que, como siempre, Pedri se va a estresar jsjsjs