Lena: Bajo Vigilancia.
————☫————
Cuando el coche se detuvo frente a la sede de La Vorona, Sasha no me dio oportunidad de salir por mi cuenta. Antes de que pudiera siquiera soltarme el cinturón, ya había abierto la puerta y me levantaba en brazos como si no pesara absolutamente nada.
- Sasha, puedo caminar. -Intenté protestar, pero no sirvió de nada.
- No tengo ganas de discutir.
Bufé, aunque en el fondo sabía que no valía la pena insistir. Lo conocía lo suficiente como para saber que, cuando algo lo preocupaba, su instinto era hacerse cargo de todo, aunque eso significara cargándome como un saco de papas.
Nos llevó directo a la cocina, ignorando las miradas curiosas de los que estaban por ahí, y me sentó con cuidado sobre la encimera.
- Quédate quieta.
Dicho eso, comenzó a abrir y cerrar cajones como un loco, sacando cosas y dejando otras regadas sin importarle el desorden que hacía.
- ¿Dónde mierda está el botiquín?
Antes de que pudiera responderle, Viktor entró detrás de nosotros, su expresión una mezcla entre confusión y furia contenida.
- ¿Se puede saber qué coño ha pasado? -preguntó, cruzándose de brazos. Sus ojos pasaron de Sasha a mí, deteniéndose en la sangre seca en mi sien-. ¿Por qué está herida? ¿Y qué mierda le pasó al coche?
Sasha no respondió de inmediato, demasiado ocupado revisando un armario más.
Así que lo hice yo.
- Nos estaban siguiendo. Un coche negro, igual al del gimnasio. Nos llevó hasta una fábrica abandonada y después... -Hice un gesto con la mano-. Nos embistió.
Viktor soltó una maldición y frotó su mandíbula con una mano.
- ¿Creéis que fue Zenith?
Asentí.
- Alexander me mandó un mensaje esta noche, invitándome a otra reunión. Pero ni siquiera se molestó en preguntarme cómo estaba después de lo de Oliver. ¿No te parece sospechoso que, justo cuando nos estamos metiendo en este asunto, empiecen a seguirme?
Viktor no respondió de inmediato, pero su expresión se endureció.
- Sí, lo es.
Sasha finalmente encontró el botiquín y volvió a mi lado, sacando gasas y un bote de antiséptico.
- Voy a limpiarte eso.
- Sé hacerlo yo sola, no es la primera vez que me hago una herida.
- Ni la primera vez que no te tomas en serio que puedes estar peor de lo que crees. -Sasha no aceptó réplica. Con suavidad, presionó la gasa contra la herida.
Solté un siseo, pero no me quejé. Viktor suspiró y sacó su móvil del bolsillo.
- Voy a averiguar si alguien más ha visto ese coche rondando la ciudad. Si Zenith nos está vigilando, quiero saber hasta qué punto.
Asentí. Esto se estaba volviendo mucho más serio de lo que había imaginado.
Viktor nos ofreció quedarnos en la sede esta noche. No podía prestarnos un coche para volver, y aunque Sasha insistió en que le diera el suyo, Viktor se negó sin miramientos.
- Tengo que volver a casa con mi familia -dijo con ese tono seco y autoritario tan suyo-. Ya saben dónde están las habitaciones, acomódense hasta mañana.

EST?S LEYENDO
Whisper&Brew
Teen FictionEn una ciudad donde la información es el bien más preciado, Lena ha aprendido a moverse en las sombras. Due?a de una librería-cafetería con más secretos que libros, ha construido su vida lejos de un pasado que se niega a olvidar. Sus clientes no sol...