抖阴社区

?8?

357 26 8
                                        


Pedri en cuanto se dio cuenta de que no estaban solos, intentó con su cuerpo cubrir la desnudez de Gavi, en afán a que no lo viesen. A Gavi le pareció un tanto tonta su acción, dado que en más de una ocasión, todos sus compañeros se habían visto entre ellos, pero aun así, no evitó sonreír mediante por lo tierno que se vio el menor.

Con un sonoro respiro, Gavi se agachó a tomar la toalla que hace unos segundos antes Pedri le había tirado.

-Yo de ti bajaría ese celular -murmuró, una vez había cubierto su parte baja, para dirigirse a su casillero.

-¿Por qué? ¿Te da pena que todos se den cuenta de lo fácil que eres? -Rió, maliciosamente, Raphinha. -Voy a subir en todas partes lo perra que eres, Gavi, y lo marica que se ha vuelto tu amigo -dijo, mientras miraba su celular con una sonrisa.

-Este maldito...

Pedri se dispuso a ir a tomarlo, pero se vio interrumpido por la voz de Gavi:

-Quédate en tu lugar, Pedri.

-Este se merece que-

-Que te quedes en tu lugar -volvió a ordenar aún estando de espaldas-. ¿O es la sola idea de que te vean conmigo la que te tiene así?

-Me importa una mierda si todos se dan cuenta que gustas-

-"Encantas" -musitó Raphinha, siendo nuevamente mirado por Pedri-. ¿Qué? Nada más te estoy corrigiendo. -Sin importancia se recostó en la pared.

-Lo que realmente me importa es cómo tú estabas -le hizo saber, volviendo a ver la espalda de Gavi.

Gavi no le contestó, más, sin embargo, se dio la vuelta con su celular en mano, posando sus ojos en Raphinha.

-En el momento en el que tú subas ese video, tu imagen de hombre "hetero" se irá abajo, junto con lo ardido que estás por no dejarte estar entre mis piernas.

Silencio.

Todo quedó en absoluto silencio por un par de segundos.

-¿Y cómo se supone que harás eso? Es la palabra de un marica contra la mía -dijo Raphinha, "despreocupado".

-No, son tus fotos y videos, contra la palabra de otro marica. -Pasando por el lado de Pedri, quien estaba estupefacto ante la reciente información, Gavi se hizo unos centímetros frente al chico que estaba hecho ahora hielo. Abriendo la galería de su celular, en su cara le enseñó a Raphinha todas las fotos que tenía que él mismo le había enviado hace un tiempo-. Oh, mira, acá está el video en que te la jalas mientras gimes mi nombre.

Reproduciéndose el video, frente suyo, Raphinha iba a lanzarse sobre él.

-Maldita pe-

-Shh, que viene la mejor parte -le cayó Gavi, dándole un puño improvisado en el estómago.

"No sabes lo cuanto que me calientas cuando estás duchándote, Gavi, ahg... Me encantas, joder, te quiero para mí," fueron algunas de las tantas palabras que se escucharon provenir del aparato, quedando evidentemente, que pese a solo vérsele un miembro y una mano sobre él, el tatuaje en su cadera y la voz, eran características de Raphinha.

-Oye, Raphinha, ¿alguna vez siquiera te has visto allá abajo? Es que Dios, esto parece una lombriz, de lo pequeña que es. -Pausando el video, miró a Raphinha que se reponía del golpe y la vergüenza de ser expuesto-. Siento hasta pena por tu novia. De seguro a la pobre le toca estar fingiendo que disfruta estar contigo.

-No hay manera que asegures que en realidad me pertenecen esas cosas.

-¿Es en serio? -Gavi empezó a reír, para después acercarse a Pedri-. Oye, Pedri, ¿en dónde más has visto ese tatuaje y precisamente en ese mismo sitio? -cuestionó, enseñándole el video.

Pedri no respondió, solo se limitó a apretar sus puños y mirar en dirección a Raphinha.

-Claro que nadie más, y estoy seguro de que los chicos una vez vean esto, sabrán que se trata de ti. Es que ni siquiera yo debo decir que te pertenecen. -Se volvió a acercar a Raphinha, quedando ahora a centímetros de él-. Así que más te vale eliminar lo que tienes, porque nosotros, a diferencia de ti, no tenemos nada que perder.

(...)

Gavi y Pedri se dirigían tranquilamente al estacionamiento, por el auto del castaño.

-Dios, en serio siento que me podría comer todo un menú -murmuró Gavi-. ¿Sabes en qué estaba pensando? Deberíamos pedir pollo para llevar, y comerlo en mi departamento junto con un par de películas y cervezas, ¿qué dices?

Pedri se limitó solo a asentir, para quitarle el seguro al auto y subir. Gavi se percató de que en realidad como que no le convencía su idea.

-Si no quieres, está bien -hizo saber.

-No, no es nada de eso -murmuró, tomando asiento y cerrando la puerta, siendo seguido por su amigo.

-¿Entonces qué sucede? -Gavi lo vio tirar su cabeza hacia atrás-. ¿Estás preocupado por lo que pueda hacer Raphinha? Tranquilo, me encargué bien de que no dejase ni una copia, además, no creo que quiera correr riesgos. -Rió, pero se vio detenido en cuanto vio a Pedri cerrar sus ojos, por lo que desistiendo en ponerse el cinturón, tomó una de sus manos para llamar su atención-. ¿Qué sucede, Pedri?

Pedri apretó su agarre, para después mirarle.

-Tengo tantas ganas de partirle su cara a ese idiota -confesó.

-Pero no ganarías nada con eso. Así que ya no lo pienses más.

Llevando los nudillos de Gavi a sus labios, los besó.

-Ver que te trate así me enfada tanto, y aún más porque me gustas -dijo, sincero.

-Pedri, ya hablamos de esto, dale tiempo al tiempo y verás como tengo la razón.

-No estoy confundido, Gavi. Me gustas demasiado, y quiero que tengamos algo serio.

-Mejor dejemos las cosas tal y como están, ¿sí?

-Si la cuestión es que no sientes lo mismo que yo, entonces solo déjame conquistarte. No sé cómo, porque nunca lo he hecho, y mucho menos a un chico, pero quiero tenerte para mí.

-Pedri...

-Y sí sé que tu ruptura con Fer es reciente, pero déjame, por favor -le besó la mano, una vez más.

Gavi no podía sentirse más enternecido, pero aceptar la propuesta de Pedri era como un arma de doble filo.

Estamos hablando que el chico que por tanto tiempo le ha gustado, y en su momento sintió amar de una forma distinta a lo que lo hacen los amigos, estaba por fin diciendo las palabras que tantos años atrás añoró escucharle.

No sentía cómo más responderle, porque se moría por aceptar, pero una parte suya le decía que no, que saldría una vez más herido, y que esta vez el daño sería irreparable, porque se debía a nada más y nada menos que su mejor amigo, y por sobre su interés amoroso, su amistad lo era todo para él.

Pasándose al regazo de Pedri, puso sus manos tras su nuca, para después besarle. Beso que fue correspondido de manera inmediata. Sus lenguas jugaron con la contraria, mientras que sentía el tacto de Pedri adentrarse bajo su camisa.

Mediante un suspiro, se vieron separándose, para quedarse un momento -que pareció eterno- en los ojos contrarios.

-Más tiempo, ¿ok? -dijo Gavi.

Pedri iba a refutar, por lo que una vez más, Gavi se acercó a besarle, para segundos después volver a hablar:

-Todo es muy reciente para ambos. Y si en realidad te gusto como dices, puedes esperar, ¿bien?

-Bien.

Con esto dicho, se besaron unas muchas veces más, disfrutando de lo que sea que se había vuelto su relación de amigos, y a la espera de cómo resultaría todo. O al menos por parte de Gavi, puesto que Pedri igual se pondría en el plan de conquista.

Has llegado al final de las partes publicadas.

? ?ltima actualización: Jun 01 ?

?A?ade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

?LAS DUCHAS ?[GAVIXPEDRI] [AdP]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora