Sadomasoquista

Capitulo 30

-te ves hermosa- susurro con un hilo de voz, Sonreí al notarlo un poco nervioso, él carraspeo y volvió a hablar- ¿nos vámos? - asentí sumisa.

Tomé su brazo y caminamos hacía la salida donde una hermosa limosina gris nos esperaba, el chofer nos abrió la puerta la puerta, entramos en el vehículo muy espacioso, me sente en uno de los grandes asientos rojos, la tela suave rosaba mi pierna izquierda que era donde tenía un corte desde el muslo hasta los pies.

-¿recuerdas que no nos iremos a divertir verdad? - asentí con pesar, iríamos a el matrimonio de uno de sus más grandes accionistas, no beberiamos ni bailariamos, él podría hablar y yo solo ser una muñeca a la cual exhibir- no es aproposito, no sabes controlar tu lengua venenosa y yo no estoy para escándalos...

-¿tanto miedo te da que arruine un matrimonio? - su mandíbula se contrae.

-no es un matrimonio cualquiera y lo sabes- asentí con una sonrisa divertida, Joshua la mayoría del tiempo provocaba que yo sintiera miedo, pero habían ocasiones que me aprovechaba de su preocupación porque yo arruinará las cosas.

-¿acaso no creés divertido arruinar un matrimonio... Juntos? - solté sonriente y traviesa, no me gustaba sacar mi lado juguetón con él porque siempre había un castigo o simplemente se molestaba y volvía a sentir miedo. Le miré y sus ojos soltaban chispas de emoción tras darle tan grata oferta.

-no- pero su boca nunca decía lo que sus ojos, abrumada simplemente asentí y me quede en silencio el resto del camino.

Cuando llegamos la limosina se detuvo y seguido de esto el chofer abrió la puerta, primero salió Joshua acomodando su saco, luego seguía yo, saqué mi pierna descubierta de forma lenta fuera del vehículo y después el resto de mi cuerpo, Joshua tomó mi mano para sostenerme mientras dejaba attras nuestro medio de transporte, me regalo una mirada complice y puso su mejor sonrisa, yo también lo hice. Tomados del brazo caminamos por la gran alfombra roja que nos llevaba directamente a un jardín tan grande como una ciudad entera, tuve que tragar saliba para no ahogarme, el lugar era tan enorme que estaba segura que mas de mil personas cabían en este jardín, la decoración era completa en tonos dorados y blancos, unas enormes bolas doradas cubrían nuestras cabezas que daban la luz al lugar, en el lado derecho unas díez mesas largas con manteles finos blancos llenos de aperitivos y vinos, al lado izquierdo mesas de un material desconocido de color dorado y sillas blancas, y en el centro, un hombre con los nervios de punta en un traje negro con un pañuelo rojo en el bolsillo de su saco. Nos miró a ambos, movió la cabeza en dirección a Joshua en forma de saludo, él estaba a punto de casarse y nosotros llegamos un poco tarde por lo que no podría bajar de su lugar a saludarnos. Su mirada paso de Joshua a mi, le regalé una sonrisa tranquilizadora esperando que al menos sintiera el apoyó de alguién ya que por lo visto la señora que estaba a su lado no hacia más que ponerlo nervioso.

Joshua tiró de mi y nos acomodamos con el restó de personas, obviamente en el órden que la organizadora nos había dicho, gracias al cielo estabamos en uno de los primeros asientos para presenciar tan bonita unión, no me perdería un solo detalle de la boda y eso me emocionaba, desde pequeña había visto películas de amor, y aun que mi historia no tuviera pisca de ésto, me emocionaba saber que habían personas que aun deseaban su final feliz.

La música comenzó a sonar anunciando la llegada de la novia, todos nos pusimos de pie, yo me acomodé lo suficiente para poder tener una vista perfecta de la novia, llevaba un vestido de corse en la parte de arriba que hacía resaltar sus pechos, su vestido no tenía cola ya que era como el de cenicienta, abultado y largo hasta el suelo, era de un color marfil precioso, ella se veía preciosa, caminó con pasos torpes por el nerviosismo y reí bajito, miré al novio y no pude evitar sentirme más emocionada cuando él derramo unas cuantas lágrimas al ver a su bella futura esposa tan hermosa. Volví a sonreír.

-deja de sonreír, pareciera que fueras tu quien se va a casar- me susurró Joshua, me di la vuelta solo para mirarlo molesta.

Volví mi vista a la pareja que ya estaba situada justo frente al cura, se miraban con amor, era algo realmente hermoso. El cura dijó unas cuantas palabras, luego los novios dijeron sus votos, que por cierto eran lo más cursi que algúna vez oí.

-...los declaró marido y mujer- ambos se dedicaron las sonrisas mas sinceras- el novio puede besar a la novia- y antes de que pudiera terminar, el novio ya estaba devorando los labios de su ahora esposa, todos reímos, todos menos Joshua.

Después de unos minutos en los que se felicitó a los ahora marido y mujer, pasamos al gran salón que había dentro de una mansión el triple de grande que la de Joshua. Cuando estuvimos dentro solté el brazo de Joshua para poder dar un paseo sin su maldita amargura.

-¿dónde vas? - preguntó con el ceño fruncido.

-a dar un paseo lejos de tu amargura- se acerco molesto.

-Ashely te dije que no quiero escándalos, no me gustan este tipo de eventos cursis, no me obligues a sonreír como estúpido para tenerte al márgen - sentenció.

-nisiquiera viste la mirada que la novia le regalaba al novio mientras caminaba al altar, estoy segura que hubieras sonreído al ver aquélla felicidad- él negó y solto una disimulada carcajada.

-lo único que vi de la novia fueron sus torpes pasos al caminar-.

-estaba nerviosa-

-tú también lo estabas el día de nuestro matrimonio- como puñal se clavaron en mi sus palabras- pero eras elegancia y gracia pura encima de tus zapatos mientras caminabas en mi dirección. - terminó con una sonrisa hermosa que me derritió, era un hombre tan cruel y detestable, que odiaba sentir que era tan atractivo.

***

Moví mi cabeza varías veces para al fin lograr salir del trance en el que me había metido en medió de una misión, miré la hora en mi celular, veinte minutos, había perdido veinto minutos recordando cursilerías cuando en ese tiempo pudieron hacerle daño a Joshua. Preocupada volví a guardar el celular y colocarme la cartera de forma correcta, camine despacio y sigilosamente por alrededor de la casa buscando alguna ventana, al parecer solo contaba con dos ventanas adelante, puerta delantera y la trasera, más nada, pensando en que hacer me decidí por la puerta trasera, era la única forma más segura, de que por lo menos no me maten al llegar.

Abrí la puerta de forma muy lenta y silenciosa, por suerte la puerta no tenía seguro, era sospechoso sabiendo que tenían secuestrado a un hombre; al entrar me di cuenta de que la puerta trasera era la de una cocina, estaba limpiá pero habían restos de comida fresca, con eso confirme que estaban aquí, al estar cruzando el umbral que daba hacía el living me percate que tenía las manos vacías, si alguién me descubría podrían matarme en segundos ya que no tenía nada con que defenderme, mentalmente asesine mi maldita cabeza de pollo, Joshua tenía una que otra arma en la casa siempre por seguridad, pude haber traído una, maldiciendo mentalmente, me acerque a uno de los cajones donde gracias a todos los dioses encontre un cuchillo que parecía carnicero y bastante puntiagudo. Con ahora un poco más de tranquilidad seguí mi camino más allá del umbral llegando al living, analice el lugar detalladamente fijandome exactamente en el suelo, habian unad pequeñas gotas rojas, supuse que era sangre asi que las seguí, levante la vista al notar que cada vez las gotas eran más grandes y frente a mí en el comedor, estaba mi esposo, el hombre que amaba inmensamente sentando en una silla, amarrado de pies y brazos a su asiento, tenía la cara ensangrentada por todos lados, su ojo izquierdo inchado, de su nariz aun salía sangre y sus labios levemente rotos, mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, estaba sufriendo todo eso por mí.

-¿ya no es tan guapo verdad? - me paralice al escuchar esa voz que alguna vez sentí tan dulce, tan familiar, quizé darme la vuelta para ver su rostro pero antes de poder hacer un solo movimiento él tenía una pistola apuntando justo mis costillas- bienvenida preciosa...

****

Espero que les guste🙆🙆