12 de octubre de 2018, Buenos Aires, Argentina
Yo, sin embargo y pese al agotamiento extremo que siento, no puedo dormir. Me paso las próximas dos horas viéndolo dormir en la oscuridad, acariciando simultáneamente su cara y su pelo.
Inevitablemente, mis ojos se llenan de lágrimas nuevamente. Aprieto los párpados y sacudo la cabeza para deshacerme de las lágrimas antes de que caigan. Quito despacio su brazo de alrededor de mi cintura y me levanto despacio de la cama para no despertarlo. Sigo vestida, pues nos metimos completamente vestidos en la cama. Cojo el móvil y busco entre mis contactos. Pulso el botón de llamar y salgo de la habitación para no despertar a Valentín mientras hablo por teléfono.
—¿Andro? —responde una voz masculina. Casi podría jurar, solo oyéndolo pronunciar mi nombre, que ha bebido. Al otro lado de la línea se oye música fuerte y gente gritando, así que estoy un paso más cerca de confirmar mi teoría.
—Perdón por molestar, ¿estás ocupado?
—No, no. —niega rápidamente. Oigo cómo se abre una puerta y acto seguido se cierra, aislando un poco el ruido de fondo, por lo que creo que ha entrado en otra habitación para atenderme— Decime.
Aprieto ligeramente la mandíbula y acto seguido rompo en un silencioso llanto, o al menos eso es lo que creo, pero él se da cuenta.
—Andro, ¿estás llorando? —dice preocupado de repente, cualquier rastro que me haya dado a pensar que estaba borracho, desapareciendo por completo de su voz— ¿Te sentís mal?
—Dani... —sollozo— ¿Crees que puedes venir a casa de Valentín? —me seco las lágrimas— Por favor. —suplico.
—¿Qué? —dice algo confuso— ¿Estás acá? —asiento, aunque sé que no puede verme. Por arte de magia, parece conocer mi respuesta— ¿Qué hacés acá? ¿Cuándo llegaste? —un segundo después, cambia el rumbo de la conversación— Estaré allá en dos minutos, linda. Lo prometo. —vuelvo a asentir.
Antes de colgar, oigo la puerta abrirse de nuevo y cómo grita "Todos fuera de acá, se acabó la joda".
Dani tarda menos de quince minutos en llegar. Sorprendentemente rápido teniendo en cuenta la distancia que hay entre su casa y la de Valentín. Me preocupa un poco que haya llegado tan deprisa, pero de todas maneras lo agradezco. Para cuando llega, yo ya estoy en la calle esperándolo, sentada en las escaleras del edificio donde está el piso de Valentín. En realidad salí a la calle nada más colgar, porque necesitaba tomar el aire.
Dani se baja de un coche, saltando fuera del asiento de copiloto antes incluso de que el vehículo se detenga del todo. Cierra la puerta y el coche se marcha tan rápido como ha llegado, haciendo eses. Temo porque haya venido en ese coche conducido por alguien borracho, pero me alegra ver que está aquí y que está bien. Se acerca torpemente hacia mí y me pongo en pie para saludarlo. Cuando llega junto a mí, se detiene justo en frente y me mira en silencio. Finalmente me abraza y entonces lloro de nuevo.
—Sh... —me acaricia el pelo— Ya estoy acá, Andro. —sus brazos me rodean de manera protectora con más fuerza— Contame qué pasó.
—Valentín... La canción... —digo entre sollozos y de manera entrecortada.
—Lo sé, linda. —suspira— Lo sé...
Daniel me abraza pacientemente durante largos minutos en los que lo único que puedo hacer es refugiarme en su abrazo y llorar. Su estatura es bastante más baja que la de Valentín, de hecho, debe de ser simplemente unos diez o doce centímetros más alto que yo. Recuerdo que Lidia era unos centímetros más alta que él, incluso. Por lo tanto, abrazarlo no es lo mismo que abrazar a Valentín. Apoya su mentón sobre mi cabeza y respeta el silencio que necesito y el dolor que siento. Su abrazo es cálido y dulce, prometiendo que todo irá bien, aunque no creo que pueda cumplirlo. Huele a alcohol, marihuana y su perfume, huele a Dani.

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Andrómeda ~ Wos
FanfictionPrimera parte de "Caravana" "No puedo amar, ?no puedo amar? ?O solo no amo como aman los demás? ?Cómo hay que amar?" "Andromeda"' story. ?Historia totalmente ficticia, ambientada en la FMS Argentina 2018. ?No se aceptan copias ni adaptaciones. ?Inte...