THE FEAR ━━ LUMITY BETA.

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THE FEAR.
番号 2.
DESATENTAMENTE, LUCÍA NOCEDA.
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Sintió que caía en picada al suelo, el repentino rebote del desgastado colchón de su cama hizo que despertara con la misma sensación que se tiene al soñar que se cae de un décimo piso. Lucía estaba desorientada, y de no haber estado alterada por la forma en la que fue arrancada de su descanso, hubiera tardado menos tiempo en identificar a su hermanita dando brincos en su cama como si tuviera cinco años.

—Luz. —se quejó con voz ronca, tratando de taparse el rostro con la cobija pero fracasando en el intento —. Luz, ¿qué tienes?

—¡Cici! —exclamó con un tono risueño que en otras circunstancias habría contagiado de alegría a Lucía —¡Dios mío, Cici!

—¿Qué hora es? —se sentó aún adormilada recargando la espalda en la pared —. Vas a despertar a mamá.

—¡Cici!

—¿Qué quieres? —ya se estaba poniendo de malas.

—¡Mira, mira, mira!

Luz, con los ojos tan brillantes como estrellas a punto de alcanzar la súper nova, le extendió el celular a su hermana. Tenía la aplicación de correo abierta con un mensaje mostrándose en toda su gloria.

La mayor de las hermanas tuvo que hacer el típico movimiento tan común en adultos a los que se les dificulta enfocar letras pequeñas en poco tiempo; alejar el teléfono y acercarlo de nuevo lentamente para acomodar sus ojos.

"¡Enhorabuena!
Es un placer informarte, Lucía Noceda,
que has sido la afortunada ganadora
del sorteo que hemos organizado
para ustedes los fans, que han
demostrado apoyo y lealtad sin importar
qué.

A continuación, para que puedas
confirmar la veracidad de este correo,
te brindamos un que hemos grabado
específicamente para ti.

Atentamente, Amelia Blight."

Lucía tenía la ceja enarcada, sin saber aún de qué se trataba eso. Abajo del mensaje aparecía un rectángulo negro con el símbolo de play en él. Lanzó una mirada fugaz a su hermana, quien no dejaba de sonreír.

Las mejillas comenzarían a dolerle si no relajaba los músculos pronto.

Presionó el video y aquella pantalla negra se difuminó revelando el rostro de la estrella de pop que tanto le irritaba. Amelia Blight.

—¡Qué onda, Lucía Noceda! —habló la chica del video con tono alegre. Lucía sintió una extraña sensación recorriéndole la nuca al oír su nombre; escucharlo salir de los rosados labios de Amelia era demasiado incómodo —. Gracias por mandar tu solicitud, estoy muy agradecida contigo y con todos aquellos que decidieron participar, pero fuiste tú quien ha ganado la posición en mi próximo reality "Shining Blight", en este correo te mandamos un link que sólo podrá abrirse desde la IP en la que fue abierta por primer vez, así que ten cuidado con compartirlo, es información únicamente para ti —guiñó un ojo —. Una vez más, gracias por haber participado, no puedo esperar a conocerte, ¡nos vemos! —y tras despedirse con la mano, el video se detuvo en seco.

Lucía parpadeó dos veces, y con una lentitud estremecedora, volteó su rostro a su hermana que seguía brillando con luz propia.

—¿Qué acabo de ver?

—¡Vas a conocer a Amelia!

—Explica.

Luz explicó todo; desde aquella vez que le mencionó a su hermana que Amelia haría un reality show, sus redes oficiales publicaron una convocatoria hacia los fans donde podían inscribirse para tener la oportunidad de participar en un programa con la estrella, y a pesar de que Luz cumplía con el requisito de ser mujer, no cumplía con el de ser mayor de edad, y por esa razón no se le ocurrió mejor idea que inscribir a su hermana.