Locura - [Gavi]

(narra Paula)

— Y que es eso que llevas puesto? - Sara, con una sonrisa y la boca entreabierta, me interrogó al verme con la camiseta de Gavi puesta.
— Te gusta? - Le modelé exageradamente - es parte de un trato.
— Ay dios mio... - Sara se llevó las manos a la cara riendo.

Reímos las dos y luego de cargar nuestros bolsos con lo necesario fuimos al Camp Nou.

Otra vez teníamos las entradas pagas en el palco VIP, con el resto de chicas que iban emocionada a ver a sus novios.

Los jugadores entraron para precalentar.

Vitoreé y grité junto a Sara aproposito, para que mi objetivo vea que llevaba puesto su dorsal. Yo ya había cumplido mi parte.

Sus ojos marrones me miraron desde el campo y me tiró un beso coqueto que provocó que mis mejillas se enrojecieran.

—

Estábamos esperando la llegada de los jugadores en el pasillo. Sira estaba a nuestro lado, sacandonos tema de conversación de forma muy amigable.

El Barça habia perdido 2-0 contra el Betis

Todo el ambiente estaba tenso. Fue muy triste ver a los chicos entrar con la cabeza gacha, desanimados y con una mirada de frustración.

— Vamos chicos! que un tropezón no es caída! - Los animó Xavi y todos los presentes aplaudiamos.

Todos los jugadores fueron a buscar ánimos a su familia y amigos.

Me alejé cuando Pedri se acercó a Sara y la envolvió en un abrazo.

Ahí fue cuando lo vi

Con el ceño muy fruncido, bebiendo agua de su botella. Decidí acercarme, porque a pesar de odiarle le tenia algo de aprecio, y la empatía hizo que se me formará un nudito en el estómago.

Me vió acercarme y volcó su torso sobre la pared del pasillo. Yo imité su gesto quedando delante de él.

— Usar tu dorsal ha traído mala suerte - bromeé con una media sonrisa. Sonrió desanimado y miró la botella que tenía en sus manos, volviendo rapidamente a la expresión de tristeza.
— Pues te queda muy bonita de todos modos... - No levantó su mirada.
— Pablo... - Levanté su mentón para encontrarme con sus ojos - lo has hecho bien...
— Que va, Pauli... ha sido un desastre - Se lamentó.
— Solo ha sido un mal dia - ahora acariciaba su mejilla - fué un partido muy dificil, no te hagas responsable de todo...

Y me abrazó.

Enredó sus brazos por mi cintura obligando a pasar los míos sobre sus hombros.

— Gracias Pauli - Apretó un poco el abrazo - es justo lo que necesitaba.
— Obvio, soy justo lo que necesitas - bromeé para descomprimir y Gavi rió.
— Por un momento me había olvidado del juego, Paulita - dejó el abrazo sonriendo. Yo reí.
— Qué? estuviste a punto de enamorarte Gavito? - apreté suavemente su brazo.
— Y ahora recuerdo por qué decidí meterme en esto... - Mordió su labio inferior y aferró una mano en mi cintura.
— Vamos chicos! ya es hora de dejar el estadio... - Advirtió Xavi.

Todos empezaron a salir en orden cuando oí una voz sobre mi hombro

— Esto no ha quedado aquí. - me estremecí al oir su advertencia.

—

Estaba acostada en mi cama, viendo Netflix. Aún no me había quitado la camiseta de Gavi, era cómoda.

Algo golpeó mi ventana, y maldije porque me habia dado un susto enorme.

Abri la ventana y lo vi abajo.