Reencarne en Enel

_______POV Narrador__________

Rebecca estaba confundida al principio, sin saber realmente qué era lo que causaba tanta conmoción en la arena.

Ella no era precisamente del agrado de mucha gente allí, así que nadie hablaba con ella.

En realidad, su linaje era odiado debido a que Doflamingo manipulaba a todos haciéndoles creer que eran gobernantes incompetentes y tiranos.

Ella no esperaba que algunos de los gladiadores de repente comenzaran a insultar y odiar a Doflamingo con pasión.

Pero esto fue similar en toda la ciudad cuando la gente recuperó los recuerdos de sus seres queridos tan pronto como Sugar quedó inconsciente.

Rebecca, la princesa de cabello rosado también recibió bastantes disculpas por parte de algunos de los gladiadores, ya que ahora sabían que Doflamingo era la causa de su sufrimiento.

Lo siguiente que sorprendió a Rebecca fue ver a su tía, Viola, entrar al pasillo y gritarle.

Kyros también llegó, pero Rebecca tuvo algunos problemas para recordarlo al principio. Luego, todos sus recuerdos regresaron a ella, sus ojos se abrieron y comenzaron a caer lágrimas.

Muchos de los gladiadores ahora también podían reconocer a Kyros, una leyenda que había conquistado la arena en algún momento, su estatua aún se mantenía en pie en sus salones.

Incluso sin una pierna, Kyros todavía tenía la presencia digna de un campeón de la arena, y muchos lo respetaban por ello.

Rebecca corrió y abrazó a su padre con lágrimas en los ojos, sin saber siquiera qué decir. Viola simplemente miró un poco hacia un lado, sin dejar que los dos disfrutaran de la presencia del otro.

Entonces notó que alguien más caminaba hacia ellos, otro gladiador. Tomó una postura, pensando que tal vez era un socio de Doflamingo.

Fue una suposición extraña, ya que los soldados de Doflamingo dentro de la arena estaban siendo asesinados por los gladiadores sin ninguna piedad.

Incluso Spartan, uno de los gladiadores que había intimidado a Rebecca en la arena durante mucho tiempo, estaba a la vanguardia de esos gladiadores, ya que mató sin piedad a tantos hombres de Doflamingo como pudo.

Sin embargo, Viola aún no estaba del todo tranquila, pues todo sucedía demasiado rápido a su alrededor.

El alivio finalmente la invadió solo cuando el gladiador se quitó el casco, revelando el rostro envejecido de un hombre mayor con cabello y barba grises.

Viola lo pasó mal bajo la tiranía de Doflamingo, pero aun así pudo reconocer al hombre que tenía frente a ella a primera vista.

"¡P-padre!" No era otro que Riku Doldo III, el padre de Viola, y ella tuvo una reacción similar a la de Rebecca al volver a ver a su padre.

Había sufrido mucho para llegar a ese punto, y finalmente ver a alguien a quien podía considerar una figura paterna la hizo llorar, ya que sintió que finalmente podía mostrar un momento de debilidad.

Este era el mismo sentimiento que había sentido al ver a Enel, durante gran parte de su vida, había vivido con miedo, poniendo cara de fuerte y haciendo lo mejor que podía para sobrevivir con todo lo que tenía.

Incluso parecer vulnerable era como pedir que se aprovecharan de ella. Y ella lo sabía por experiencia, ya que no siempre había sido tan dura como ahora.

Aun así, incluso se vio obligada a unirse a las fuerzas de Doflamingo para lograr que perdonara a su padre. Así que obviamente estaba emocionada ahora que lo volvió a ver en persona.