Deseo.
Si-eun bajó la mirada de inmediato, como si esconder los ojos pudiera borrar lo que ambos sabían. Apretó los labios, al igual que las piernas, conteniéndose, y volvió a concentrarse en verter la bebida en los vasos. Pero sus manos ya no eran tan firmes.
Seong-je se dejó caer en el sofá, con ese aire desenfadado que le era tan natural. Se reclinó hacia atrás, una pierna cruzada sobre la otra, y dejó un brazo colgando por el respaldo, adueñándose del espacio con la comodidad de quien ya se siente en casa.
-¿Y qué celebramos esta noche, ojos bonitos? -preguntó, con voz rasposa, justo cuando Si-eun se acercaba con los vasos.
-Nada -respondió el omega, entregándole la bebida sin mirarlo directamente.
-Y yo que pensaba que me llamabas para celebrar tu ruptura con el intento de alfa -dijo sosteniendo la bebida que el omega le daba.
-No es tan fácil -dijo, sentándose en el sofá, manteniendo cierta distancia entre él y el alfa.
-Puede que esto te ayude -dijo, teniéndole su móvil.
Y entonces lo vio, un video algo borroso por la oscuridad, pero bastante claro.
Su-ho besándose con la chica garrapata.-Será cabrón -dijo Si-eun, mirando con incredulidad el video.
Y con resignación, soltó el vaso en la mesa y dejó caer todo su cuerpo en el sofá sin decir nada.
-¿Ni una lágrima, ojos bonitos?
-No es la primera vez -dijo con fastidio y cansancio.
Seong-je lo miró sin poder creerlo. ¿No era la primera vez? ¿Qué clase de persona dejaría pasar algo como aquello?
-Tiene que ser bastante bueno en el sexo para que no lo hayas dejado si no es la primera vez que lo hace -dijo Seong-je, mirando al omega mientras se guardaba su móvil en el pantalón.
-No tenemos sexo desde hace meses.
-Entonces eres un idiota con ojos bonitos.
Si-eun miró a Seong-je mientras se daba cuenta de cuánto se había dañado la relación con Su-ho. Ellos no tenían sexo porque nada de Su-ho lo calentaba. Ya no había ese deseo desenfrenado de tener a Su-ho en su interior, ni el deseo de sus besos o manos en su cuerpo, ni el típico calor acumulado en su vientre bajo que antes le producía su voz, sus dedos o su control, o típico, el dominio de un alfa. Ni siquiera durante el celo.
Pero, sin embargo, la mirada del alfa a su lado sobre su cuerpo sí era capaz de provocar esos sentimientos.
Quería mostrar sumisión, quería sus labios sobre su cuerpo, su glande dentro suyo. Era un secreto que le costaba guardar, pero tenía que hacerlo. El solo pensar en aquello hizo que algo húmedo saliera de su cuerpo y aquello hizo que apretara sus piernas, como si eso pudiera esconderlo.
Sin embargo, Seong-je lo notó, notó cómo el aroma de Si-eun cambió sutilmente a uno más espeso, cómo apretaba los muslos y cómo en su mirada el sentimiento de un deseo reprimido crecía. Y aquello lo hizo sonreír mientras se pasaba la lengua por los dientes, y supo que se estaba imaginando a Si-eun al mirar su lengua.
Algo sucio, inmoral, pero que sin duda se lo daría si el omega se lo pedía.
-¿Tienes idea de lo bien que hueles cuando intentas reprimir lo que sientes? -murmuró Seong-je, sin apartar la mirada de Si-eun, con su voz gruesa y profunda que producía estragos en el interior del omega
Si-eun no respondió. No podía. Su garganta estaba cerrada, su cuerpo tenso. El calor entre sus piernas era demasiado obvio para él, demasiado traicionero. Apretó los muslos con más fuerza, como si eso bastara para borrar lo que estaba sintiendo. Pero no. No bastaba.

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If He Leaves You Alone, I Won't
FanfictionDurante a?os, Si-eun ha amado en silencio. Amado a escondidas. Soportado miradas esquivas, excusas mal disimuladas y el veneno dulce de una relación que lo consume poco a poco. Pero cuando todo se vuelve insoportable, no es Su-ho quien aparece. Es é...