SALVAME [Taeyong] Terminada.

Mis parpados de sienten pesados y realmente no sé dónde estoy. Solo escucho unos cuantos susurros a mí alrededor y entre ellos distingo la voz fuerte de Taeyong.

-Tenemos que llevarla a la enfermería-

-No, no podemos. La expulsaran si le hacen estudios- habló aquella voz.

-¿Entonces qué propones?-

-Tengo un plan

Lo último que escuché fue una puerta cerrarse.

***

-Mila- escuché antes de abrir mis ojos esta vez con más fuerza.

Había dormitado no sé por cuanto tiempo, ya saben esa sensación de estar despierto pero luego te das cuenta que sigues dormido.

-¿Jake?- Me senté en la cama con un poco de ayuda de este, mi cuerpo se sentía muchísimo mejor- ¿Qué pasó?

-Pues ayer te desmayaste justo cuando yo me dirigía hacia ti- Si, recuerdo su voz antes de eso- así que agradéceme, que por mí no te diste de lleno contra el suelo.

Sonreí

-Gracias Jake.

-¿Te sientes mejor?

-La verdad es que sí, me siento muchísimo mejor, incluso- mire hacia mi quemadura que estaba con un ungüento pero destapada. Había pasado de ser roja sangre a un tono más normal con mi piel- la herida se ve muy bien.

-Es un alivio, no sabíamos si eras alérgica al medicamento que robamos. Así que estábamos preocupados.

-¿Robaron los medicamentos?- lo miré y el pareció haber caído en cuenta de que había hablado de más- ¿Tu y quien más?

-Yo y... Taeyong.

-¿Qué?- me sorprendí mucho al escuchar que robaron los medicamentos pero aun más que Taeyong colaboró con Jake- su ex mejor amigo- para hacerlo.

-¿Tú y Taeyong?- No lo podía creer- ¿De quién fue la idea?

Él me sonrió

-Parece que de cierta manera quieras o no estas logrando que el viejo Taeyong regrese, cuando te desmayaste el corrió hacia ti pero fui yo quien te agarró así que me debes esa- me miró fijamente señalándome- luego te trajimos a tu habitación y mencioné el hecho de que te lleváramos a la enfermería, porque en realidad te veías muy mal.

-Lo sé, me sentía verdaderamente enferma ayer, pero ¿por qué no me llevaron a la enfermería?

-Taeyong dijo que no, me explicó lo que pasaría si te llevábamos y luego me dio la idea de entrar a la enfermería y robarnos los medicamentos.

-Sigo sin poder creerlo, El idiota estaba ayudándome a pesar de que me amenazó con no hacerlo nunca más.

-Por eso mismo te aseguro que tu Mila, te estas convirtiendo en alguien importante para él.

-Deja de decir tonterías, si puede que estemos comenzando a ser amigos. Pero de ahí a ser especial para él. No lo creo.

-Deja de negarlo porque entonces también estas interesada en él.

Levanté mi mano y le pegué un coscorrón en la cabeza.

-No digas eso ni en broma.

-Sabes que lo conozco bien y sé que él no haría lo que ha hecho por ti, por nadie. A ver es normal ayudar a alguien que está enfermo, pero- enumeró con sus dedos- protegerte de que no te expulsen, exponerse a una sanción por robar la enfermería, conseguir ayuda para saber que medicamento te haría bien y lo más importante hablarme y pedirme que lo acompañara a la enfermería. Eso se pasa de simplemente ayudar a alguien Mila.