Bienvenidas de nuevo. Hemos llegado por fin al último capítulo de mi historia.
Espero que la hayáis disfrutado tanto como yo disfruté al escribirla y, sobre todo, que este último capítulo esté a la altura de vuestras expectativas.
Sin embargo, aunque la semana que viene no haya actualización, seguramente empezaré a publicar un nuevo fic en esta plataforma, en este caso un snarry, por si os apetece leerlo.
Muchas gracias a todos los que habéis dedicado vuestro tiempo a leer mi historia y en especial a las que os habéis tomado la molestia de dejarme vuestros comentarios.
¡Un abrazo a todas y hasta siempre!
OoOoOoO
Capítulo 17
Sandra tiró de sus cadenas por enésima vez, de nuevo sin resultado.
Malfoy había vuelto a salir de la habitación, agarrándose el brazo izquierdo como si quemase, y aunque ella intentaba liberarse y buscar con la mirada una vía de escape, no tuvo éxito en ninguna de las dos cosas. La única puerta era la que usó el mortífago para salir y, sin varita, no podía desaparecerse.
Esperaba que el dolor del antebrazo significara que estaba siendo convocado por el Lord, para así poder tener más tiempo de escapar, pero empezaba a creer que era inútil: tardase lo que tardase en volver, ella no iría a ningún lado.
—Merlín... —susurró, y volvió a estirar con fuerza, en vano. Frustrada, soltó un grito de impotencia.
Reconocía que había actuado de manera irracional y se maldijo de nuevo por abandonar la mansión. ¿En qué estaba pensando? Todos le habían advertido que no lo hiciera, pero es que, ¿cómo iba a imaginar que la casa franca a la que la dirigió el capitán sería una trampa?
Sin embargo, al llamar a la puerta la recibieron dos hombres de aspecto turbio que la hicieron sospechar que algo andaba mal.
—H-hola... c-creo que me he equivocado de...
—Identificación, por favor —dijo uno de ellos, mirándola de arriba abajo con evidente lascivia.
Sandra dio un paso atrás, alarmada.
—¿Cómo dice?
—Estamos de guardia y no te habíamos visto por aquí antes, guapa, entenderás que no podemos fiarnos de nadie que no nos enseñe antes su identificación.
—N-no tengo ninguna —confesó, intentando que su voz no sonase demasiado temblorosa—. Sólo me han dicho que pregunte por Dovanski.
—Entonces, creo que tenemos un problema, guapa —dijo el hombre—. ¿Cómo crees que podríamos solucionarlo?
Se acercó mucho a ella, tanto, que Sandra pudo oler su aliento apestando a alcohol.
—De hecho, me debo haber equivocado de lugar. Siento haberlos molestado. Ya me voy.
—No tan rápido —dijo el hombre, sujetándola del brazo.
—Me temo que va a tener que acompañarnos, señorita —dijo entonces el otro.
Sandra intentó retroceder aún más, aferrando la varita con fuerza dentro del bolsillo, pero él la seguía agarrando con fuerza.
—¿Acompañarlos a dónde?
Los hombres se miraron entre sí un instante y desenfundaron sus propias varitas.
—Dondequiera que nosotros te digamos, guapa.
Sandra logró lanzarle un desmaius al que la sujetaba; pero el otro se apartó a tiempo y, cuando intentó lanzar un nuevo hechizo, unos fuertes brazos la apresaron por la espalda. Aferró con más fuerza su varita durante un segundo, pero el hombre que la había atrapado le retorció el brazo hasta hacerla gritar y la obligó a soltarla. Y ahí acabó todo.

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Mi fiel traidor
FanfictionVoldemort ha triunfado y ha convertido el mundo en su reino particular a base de matar a todos los que se le oponen. Sólo un prisionero cuya identidad se desconoce sigue con vida y encerrado en los calabozos del Lord. Iliana, una joven secuestrada p...