? Drunk and Incapable ?

—bueno...mis padres nunca se tomaron muy enserio lo mío, aunque recibieron citaciones o llamados de atención por parte de los profesores o la misma dirección nunca quisieron darle importancia al asunto, pensaron que sería algo pasajero, algo común en la adolescencia. Mama me acompaño a la primera sesión, pero fue la única vez y papa siempre se excusó con su trabajo, aunque, sabes...siempre estuve acostumbrado a eso, la nula preocupación de ellos no era nada nuevo para mí —no sabía que decir, me siento tan frustrado al escuchar lo que Shouyo me contaba—. Básicamente fui el hijo no deseado, llegué a una etapa temprana de sus vidas, donde eran muy jóvenes y no tenían los recursos para mantener a un recién nacido, además, luego de mi nacimiento se presentaron complicaciones con mi salud y tuve varias operaciones que fueron costosas. Mis padres tuvieron muchos problemas conmigo, así que, hasta cierto punto puedo entenderlos—un suspiro salió de sus labios— ya estaban cansados de mí y los problemas que daba.

—no—...—, no tienes que entenderlos, sus errores y problemas no tiene que ver nada contigo, ellos tenían que cuidarte, tenían que brindarte el apoyo que era necesario —Ahora podía entender porque me sentía tan mal al escucharlo, me recorvada a mi familia, mi adolescencia. Era frustrante escucharlo, porque me recordaba a mi—, nada los justifica.

—lo sé, pero... es el único consuelo que encuentro—grandes lagrimas se asomaron por sus ojos rostro—, nunca quise causarles problemas.

—Shouyo, no...— me levante de la silla y me acerque a él palmeando su espalda —tú no eres un problema, nunca pienses eso— el pelirrojo lo miro a los ojos buscando verdad en sus palabras, mantuve su mirada hasta que sentí como me abrazaba, un abrazo muy fuerte, cargado de peso y dolor, no reaccione sino hasta que sentí que sus lágrimas en mi hombro y sus gimoteos que devolví el abrazo. Durante algunos minutos seguimos abrazados, ninguno dijo nada, porque no había nada que decir ya, Shouyo había dicho todo. Ahora podía entender por qué se comportó de esa manera cuando lo conoció. Para mí pasar terminamos el abrazo, Shouyo se limpiaba las lágrimas restantes mirando el suelo

—Matsukawa

—dime Issei o Mattsun, si es más cómodo para ti.

—Mattsun... gracias por escucharme.

—no agradezcas nada, ya lo dije, eres amigo de gruñón- —...—eres mi amigo.

—Oikawa-san tenía razón, eres muy amable—una sonrisa se formó en los labios del menor

—¿Tooru dijo algo bueno de mí? Ahora veo porque esta gran tormenta— Shouyo comenzó a reírse— ¿quieres ver una película o hacer algo?

—una película estaría bien—eran las apenas las 12 así que podrían desvelarse toda la noche

Prepare algo rápido para matar el hambre que tendríamos más tarde, Shouyo se quedó sentado en la mesa mirándome en todo momento. Me decidí por hamburguesas caceras, Makki me había enseñado un poco de cocina, pero lo único que se me daban bien eran estas, así que, me puse manos a la obra y cerca de las 1 AM tenía todo listo. Shouyo se acercó a terminar de ayudarme y llevamos todo en una bandeja a mi habitación, donde tenía la televisión, porque la de la sala llevaba descompuesta desde hacía meses.

Mi habitación no era un desastre, pero dejaba mucho que desear a sus ojos, tenía papelillos de marihuana en el escritorio, su cama estaba desecha y había varias tazas de café de hace día, ni hablar de la ropa acumulada en una esquina, no quería dar la imagen equivocada al chico, pero no esperaba recibir visitas aquel día.

—perdona por el desastre—dije apenado

—está más limpia que mi habitación —asentí y sonreí por su respuesta sincera

Vimos varias películas mientas comíamos, muchas fueron de terror a pedido de Shouyo, otras fueron policiales y al final comedias románticas, hablamos de vez en cuando sobre estas muchas veces era para reírnos. Eran las 6 de la mañana cuando Shouyo, que estaba sentado alado mío en la cama, se rindió al sueño, yo no tarde mucho en seguirlo. Nos quedamos dormidos uno alado del otro.

El sol le daba en toda la cara ¿acaso no había cerrado las cortinas? Además... ¿porque se sentía tan a gusto? No tardó mucho en recordar los eventos del día anterior, ya no estaban sentados uno contra el otro, sino que Shouyo lo estaba usándolo como almohada abrazarle. No le causó molestia alguna. Aparto un poco al chico, pero sin dejarlo de abrazar busco su celular en la mesita de luz para ver la hora, no se sorprendió al ver que eran 3 de la tarde ¿Shouyo tendría algo que hacer hoy? Ayer no había dicho nada sobre alguna tarea o algo parecido. Se quedó un rato más en la cama con él, se sentía tan calentito y cómodo de aquel modo que no tenía ganas de levantarse, pero lo mejor sería despertarlo con algo de comida.