"This is not my day"
Tan glorioso y maravilloso era el paisaje que se veía en Avonlea; el sol iluminando a cada persona que pasara bajo su sonrisa brillante, acompañado de la brisa que golpeaba delicadamente los rostros de los habitantes y aquellas aves que siempre cantaban su canción; sin embargo, a pesar del día tan encantador, un joven, aspirante a ayudar a miles de personas, no se encontraba como el paisaje que estaba transcurriendo a su alrededor.
-Bash, no.- Dijo un irritado chico de cabello ondulado.-
-Por favor, Blythe.- respondió su hermano.- No todo el día te puedes quedar encerrado.
-Felizmente no es todo el día, sino, todos los días.- Mencionó con un tono sarcástico.-
-Detente ahí, jovencito.- Dijo Bash, tal como una madre enojada replicándole a su hijo.- A mí no me vas a hablar así.
Se escuchó un suspiro al interior de la habitación; luego de unos segundos, la puerta se abrió, mostrando así, a un chico no tan feliz.
-Lo siento, Bash.- Comentó arrepentido teniendo la cabeza gacha.- Es que ...- otro suspiro se escapó de sus pétalos, comúnmente llamado labios.- Ellos no entienden; son tan cerrados, tan anticuados y tan tontos.- Dijo demasiado enojado.-
-¡Hey!, ¿con esa boca besas a Delphine?.- Interrogó el de tez morena que estaba afuera de la habitación con la bebé en brazos.-
-Discúlpame, en serio, Bash.- Caminó hasta el lugar en donde dormía y se echó boca abajo.- No estoy de buen humor.- Mencionó triste a la vez que hundía su cabeza en su colchón.-
Sentándose al lado del joven Blythe, con su hija en brazos, comenzó a hablar.
-No todos somos ...- Antes de proseguir, tapó con sus manos las orejas de su bebé.- Tontos.- Retirándolas siguió.- Pero, sabes que no todos piensan igual; y en este lugar, no tan acostumbrados a los ideales cambiantes, la gente se rehusa a entender.
El menor miró a su compañero y empezó a reflexionar sobre lo ocurrido; había algo que faltaba en aquella ecuación, algo que lo hacía pensar mucho sobre lo ocurrido. Todo esto hasta que el mayor interrumpió su pequeña, pero a la vez, gran reflexión.
-Además, una jovencita de increíble pensar no estaba para ayudarte.- Dijo jugando con las manitos de su hermosa bebé.-
-No ...- Mencionó con un tono triste y con su mirada que estaba posada en la nada.
-Ni para decirte.- Tosió un poco y prosiguió con una voz sumamente aguda y horrible para los oídos.- ¡Ay, Gilbert! Escápate conmigo de este nundo atroz y vayámonos a otro lugar para darnos amor. Muac muac muac.- Finalizó con una carcajada hasta que sintió una almohada en su rostro.- ¡Hey! La bebé.- Comentó preocupado mientras examinaba a su pequeña hija.- ¿Estás bien, Delly?- Dijo con el mismo tono de preocupación.- ¿El monstruo de tu tío te hizo daño?- Mencionó de manera amenazante a Gilbert.
-No me mires así, tú empezaste.- Dijo para mostrar las palmas de su mano en un gesto de demostrar inocencia.-
-Esto aún no acaba.- Comentó el mayor mientras se ponía de pie para salir de la habitación junto a su bebé.- Luego no te quejes si te llegas a despertar porque te dieron un golpe en la cara con una almohada.- Fue lo penúltimo que se escuchó en aquella habitación.-

EST?S LEYENDO
~????ρ ???~
Fanfiction-Por favor, ayúdame -mencionaba con los ojos llorosos mientras observaba a esos luceros que la miraban con pesar. Ella era odiada por la sociedad y él amado por ella; pero, ?qué pasaría si cambiara todo? Portada hecha por: @Anelismitmac22. Love you...