Amanda no daba créditos a lo que escuchó, me alejo de ella caminando hacia la ventana nuevamente.
—Melanie ¿De qué hablas? Estás mintiendo ¡Le crees a él y lo estás encubriendo! —se alteró, la escucho caminado así que recojo el diario de una silla que estaba en el balcón y volteo haciéndola detener su caminata, sus ojos se agrandan, enojada se acerca y me arrebata el diario pegándolo de su pecho—. ¡¿Estás loca?! ¡Sabes que esto es privado!
—¿Y eso es lo único que te importa? ¿No tienes curiosidad de porqué, después de tantos años, lo vine leyendo ahora? —digo y ya no puedo aguantar más, de mi boca suena un sollozo. Amanda parece no saber qué hacer, me mira entre preocupada, impactada y nerviosa.
—Mel, yo... No entiendo qué sucede...
Me acerco a ella molesta tomándola por los hombros con fuerza, ella trata de soltarse con el diario aún abrazándolo, pero en este momento soy bastante fuerte que me desconozco. La miro con enojo, con el corazón herido y odio.
—¡Que te escuché ayer! ¡Ronny te escuchó hablar con Duay y por eso fui! Ni él ni tú sabían que yo estaba allí escuchando todo —comienzo a llorar de la rabia, de la traición—. Entonces hablé con Darren también y me contó todo.
—Meli yo puedo explicarte las cosas —me dice en un pequeño desespero creciendo en ella.
—¡Por eso! ¡Es por eso que decidí leerlo! ¡Porque sentía que si te preguntaba me ibas a mentir como justo lo estabas haciendo! ¡¿Quién mierda eres?! —se escuchó la puerta alguien tocando pero ambas lo ignoramos, Amanda cerró los ojos con fuerza.
—Meli...
—¡No me llames así, maldición! ¡¿Por qué me mentiste todo este tiempo?! ¡¿Acaso no te casabas de fingir quererme?! —ella negó rápidamente sin abrir los ojos.
—Siempre te he querido Mel. Es... Es solo que eso... Eso yo... No sé...
La empujo haciéndola tropezarse y caer en su cama. Comienza a llorar sin mirarme.
—¿Crees que estoy molesta por lo que hacías que esos chicos no se fijaran en mí? ¡No Amanda! ¡Me siento traicionada, me siento en otra dimensión! ¡Me duele que hayas fingido! ¿Quererme? ¡¿Cómo puedes quererme si siempre hablabas mal de mí con todos ellos para tener la atención?! ¡Eso es lo que valía para ti más que nuestra amistad! ¡Y sabiendo que con Duay las cosas han sido diferente, que me enamoré por primera vez y vienes a querer hacer lo mismo! —ella sigue sin mirarme y solo llora apretando el diario aún más—. ¡¿Cómo se sintió que él fuera el único que no cayó en tu maldita trampa?! ¡No, aún peor! ¡¿Qué se siente que alguien que conocí el año pasado me quiera más que mi propia mejor amiga?!
—¡Perdóname Mel, no sé por qué hacía esas cosas!
—¡Claro que lo sabías muy bien! ¡Tú misma escribías que deseabas que yo fuera miserable para sentirte reconfortada! ¡¡Que hasta incluso deseaste que mi mamá hubiera muerto aquella vez!!
—¡No, Melanie. No fue así! ¡Tú lo leíste, leíste que yo no estaba orgullosa de haber pensado así! ¡Lloré toda la noche por sentirme tan mala, tan cruel! —gritó levantándose y por fin viéndome. Me río a secas, sin una pizca de gracia. Se escucha una voz preguntando si todo estaba bien, volvimos a ignorarlo.
—¿Pretendes manipularme de nuevo con eso? ¡Sé toda la mierda que leí en ese maldito diario tuyo! Y créeme, me hubiese gustado buscarlo alguna excusa, porque no puedo creer que tú hayas sido así todo este tiempo. Si realmente te dolió pensar así, entonces no tiene sentido que siguieras actuando así hasta ahora.
Sollozamos por unos cuantos segundos, ella abría la boca pero no podía encontrar, a mi parecer, otra mentira para salvarse.
—Ni lo intentes, no hay forma de explicar esto —me encamino hacia la puerta pero ella me toma del brazo mirándome con súplica.
—¡Perdóname Mel, claro que te amo, eres mi mejor amiga, mi hermana!
—¡Cállate y suéltame! —grito zarandeándome y logrando soltarme de ella.
—¡Melanie, podemos solucionarlo! ¡Eres muy importante para mí!
—¡¿Para qué ?! ¡Solo te he servido para humillarme y hacerte ver mejor! ¡Solo yo fui tu amiga! ¡Mi familia te ayudó también en esa época desastrosa de tu vida! ¡Trataba de ayudarte porque sabía que habías sufrido! ¡Y tú solo, de egoísta, pensabas que eras la única sufriendo! ¡No fuiste nunca mi amiga!
—¡Mel! —solloza tratando de agarrarme las manos, pero me muevo rápido empujándola, se tambaleó pero volvió a acercarse, forcejeamos un poco porque ella quería abrazarme y yo lo impedía. La puerta se abrió pero nosotras seguíamos en eso. Ella gritando que la escuche y yo que se aleje de mí.
—¡Chicas ya basta! —era la voz de Ronny tratando de separarnos, cuando me ayuda a alejar a Amanda sosteniéndola en sus brazos sollozo de nuevo, siento que no puedo respirar, la miro señalándola.
—Tú, enferma de mierda, no te acerques nunca más en tu puta vida a mí, a mi familia y definitivamente te quiero lejos de Duay. Si vuelvo a verte cerca de alguno de ellos voy a partirte la nariz. Te lo juro —digo sintiendo un golpe en el alma, no podría golpearla aunque quisiera, jamás en la vida me había referido a ella de esta forma, pero mi rabia pudo más que yo, y la verdad es que no quería pensarlo ni arrepentirme.
Ella sollozó más fuerte tratando de zafarse. Yo me giré y mientras salía y bajaba las escaleras la escuchaba gritar con desespero.
—¡Meeeeel! ¡Meeeel no me hagas esto! ¡Te necesito! ¡Mel, perdóname por favor! —vi a su madre mirándome preocupada pero no quería hablar más, quería llorar, quería llegar a casa y desahogarme.
Salí de allí tomando un taxi. Jamás había tenido un decepción tan grande en mi vida, hoy descubrí que los amigos también te rompen el corazón.
***

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Sombría Embelesada
Teen Fiction"Observa detalladamente la belleza de la sombra..." ?Quién se podría enamorar de Melanie cuando Mandy existía? ???Portada hecha en Picrew con el dise?o de DJARN.???