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Cuando llegas a casa, Tim ya está arrodillado en la cama, con solo sus calcetines Blue Beetle I estampados a medida, con la polla en posición de firmes y esperando ansiosamente tus instrucciones. Le prometiste que esta noche sería la noche perfecta, incluso compraste una varita mágica nueva solo para la ocasión, y por sus mejillas sonrosadas y su sonrisa tímida, se nota que lo estaba esperando con ansias.
"De acuerdo, Timbo. No te muevas". Le sonríes mientras cruzas la habitación, sacando una vieja venda, tu juguete nuevo y un bote de lubricante de la mesita de noche. Tim te observa atentamente mientras te subes a la cama frente a él hasta que le cubres los ojos con la sedosa tela. Le das un casto beso en los suaves labios antes de recostarte para admirar su musculosa figura, su piel pálida y el oscuro vello que adorna su parte inferior del cuerpo, hasta que ves que sus dedos de los pies se mueven con anticipación. Los cuentas, haciéndole esperar hasta que llega a los treinta antes de rendirte. "Túmbate, con las piernas abiertas y las manos sobre la cabeza."
Siempre ávido de elogios y siempre atento a su entorno, Tim sigue tus instrucciones al instante, poniéndose cómodo sin darte empujoncitos ni preocuparse por dónde estás.
"¡Guau! ¿Qué bien te estás portando hoy?", murmuras, y él te da las gracias como agradecimiento, con las mejillas ya dos tonos más oscuras. Si quisieras, podrías hacer una tabla bastante acertada de los niveles de excitación de Tim usando solo muestras de pintura rosa y roja.
"Sigue así." Le adviertes, disfrutando de cómo sus caderas se estremecen al sentir el lubricante frío que empiezas a aplicarle a lo largo del pene. Ya empieza a jadear mientras rodeas su miembro con la mano, sacudiéndolo con movimientos lentos y sueltos. "Si te mueves, pararé y tendrás que esperar hasta mañana por la noche para tener otra oportunidad de correrte. ¿Entendido, cariño?"
"Sí." La palabra suena tensa, como si le saliera de la garganta entre los labios mordidos mientras intenta con todas sus fuerzas no mecerse entre tus dedos. "Hazlo, por favor."
"Ya que lo pediste tan amablemente." Sin embargo, te tomas tu tiempo deliberadamente mientras localizas el botón de encendido y cambias las diferentes velocidades y ritmos hasta encontrar uno que te guste.
En cuanto presionas la punta del vibrador contra la base del pene de Tim, su boca se abre de par en par, y un gemido largo y obsceno escapa de sus labios. Sus piernas permanecen bien abiertas para ti, pero las levanta en el aire, siguiendo la curvatura de sus dedos y, de paso, ofreciéndote una vista magnífica de su estrecho trasero.
"¿Se siente bien?", imploras, moviendo el cabezal vibrador a lo largo de su miembro hasta que presiona contra la rosada corona de su pene cortado. Tim responde a tu pregunta con una serie de gemidos indescifrables y un rápido asentimiento. Embriagador de ver, pero no es la respuesta que buscabas. -Vamos, Timmy, tú puedes. Dime cómo te hago sentir.
-Sssss. -Sisea mientras rodeas su punta, hundiendo los dedos en su pelo para moderar su fervor. No es exactamente la posición en la que empezó, pero tiene las manos por encima de la cabeza, además de que se ve tan pecaminosamente libertino, con la piel sonrosada y el pelo revuelto, que lo dejarás pasar. -¡Mierda! Tan bueno, tan, tan bueno. ¡No pares, por favor, no pares!
Las venas de su pene ya se contraen y palpitan bajo tu tacto. Cada vez que tu mano llega a la base, sus testículos se tensan más. Respira pesada, la piel sudorosa se calienta más con cada movimiento del vibrador. Pobrecito, no va a durar mucho.
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Otro capítulo de Tim siendo sumiso pq este twink es todo menos dominante
Wow yo actualizando en menos de una semana, queclase de hechizo oscuro es este🗣🗣
