?Por Mi Estas Aquí?

El Uchiha no quería que Naruto muriera. Acercarse a él sin ser detectado sería difícil, pero eso no le importó.

Desde la distancia, Kakashi observó a Sasuke moviéndose hacia Naruto. En un principio pensó que pelearía con él, pero pronto se dio cuenta de que el azabache no tenía esa intención.

Justo en ese momento, Sakura llegó junto a su sensei. Al ver a Sasuke acercándose a Naruto, su instinto la llevó a actuar de inmediato.

—¡Sasuke...! —susurró, con intención de correr hacia él.

Sin embargo, Kakashi la detuvo con una mano en el hombro.

—Alto, Sakura. Espera y mira —dijo con seriedad.

Sakura apretó los puños, pero obedeció. Sus ojos no se apartaban de los dos chicos.

Sasuke, sin dudarlo, se adentró en la peligrosa cubierta de chakra que rodeaba a Naruto. Sabía que el calor era insoportable y que su piel podía quemarse, pero no le importaba. Solo tenía una cosa en mente:

"Debo ayudar a Naruto, sin importar qué."

El dolor era intenso. El chakra de Kurama ardía, el aire era denso y sofocante, y la piel de Naruto estaba roja y quemada. El rubio gritaba de agonía dentro de aquella forma bestial.

Sasuke no resistió verlo así.

"No puedo... No puedo dejarlo así."

Sin pensarlo dos veces, se lanzó hacia él y lo abrazó con todas sus fuerzas.

Dentro de la mente de Naruto

—Hola, Naruto.

Una voz profunda y seria resonó en la oscuridad.

Naruto abrió los ojos de golpe.

—¿Q-qué...? ¿Dónde estoy? —preguntó, desconcertado—. Lo último que recuerdo es haber visto a Madara...

—Ya veo... No lo recuerdas.

El rubio frunció el ceño al reconocer la voz.

—¿Qué quieres, Kyūbi?

Kurama soltó una risa profunda, pero no de alegría.

—¿Qué quiero...? ¡Quiero salir, Naruto! ¡Déjame salir! —rugió con fiereza—. Si me liberas, yo te ayudaré. ¡Juntos podremos vengarnos de todos!

Naruto sintió un escalofrío.

—¡No! Si te dejo salir, destruirás toda Konoha. ¡No voy a permitirlo!

—¡Naruto! —gruñó el zorro con enojo—. ¡Abre los ojos! ¿Realmente crees que te quieren? ¿O solo se preocupan por ti porque no quieren que yo escape?

Naruto apretó los puños.

—No... No es cierto. Hay personas que me quieren de verdad.

Pero la duda comenzó a sembrarse en su interior.

Kurama se preparó para atacar su mente con más palabras venenosas, pero de pronto, Naruto sintió algo diferente.

Un chakra cálido. Un chakra familiar.

—¿Este chakra...? Lo conozco... Me tranquiliza de una forma extraña... ¿Pero quién es...?

••

Naruto aún no se tranquilizaba del todo. Todavía quedaban cinco colas de chakra manifestadas.

Sasuke tomó una decisión drástica.

Sin importarle nada más, cerró los ojos y, con suavidad, acercó sus labios a los de Naruto.

El efecto fue inmediato.