Después de hacerse el tonto y casarse con el villano ciego [Transmigración]

Sintiendo la frialdad en su cuello, junto con esta disculpa ahogada, el corazón de Pei Yi pareció aplastarse en dos mitades.

En estas pocas horas, ¿cuánto había reprimido Bo Yueming su culpa por su secuestro?

Por eso era tan salvaje, frágil y agitado.

" Er-ge , no es tu culpa. No necesitas disculparte conmigo".

Pei Yi imitó las acciones de Bo Yueming para consolarlo, frotando suavemente la nuca de su amante una y otra vez. "Lo sé, lo sé, no te dejé venir a mí".

"Debería haberme ido", respondió Bo Yueming en voz muy baja, sin que la fuerza de su abrazo se relajara nunca.

"No debería haberte dejado sola. Debería haber aprendido la lección de los dos primeros banquetes, pero aun así me lo tomé a la ligera".

Pei Yi lo convenció con un toque de humor: "Está bien, te perdono. Le pediré al Sr. Bo que preste atención la próxima vez, ¿de acuerdo?

No se podía imaginar que un ladrón viviera en su propia casa.

¿Quién hubiera esperado que Bo Guancheng todavía estuviera pensando en encontrar a alguien que lo atacara en este momento?

Gracias a su contacto poco frecuente y su disfraz "tonto" en las ocasiones en que se encontraban, la mala información le había dado a Pei Yi la oportunidad de escapar.

Bo Yueming recuperó la cordura en el abrazo de su amante y finalmente se recuperó de su crueldad. "¿Lo golpeé fuerte hace un momento?"

Pei Yi le dio una palmada en la espalda. "Si ah. Si no hubiera venido, lo habrías matado a golpes".

Bo Yueming aflojó su agarre, pero la hostilidad en su corazón no se había disipado por completo. "Deberían matarlo".

Los trucos de Bo Guancheng no se habían utilizado una o dos veces. Él había planeado el accidente automovilístico, lo drogó y lo calumnió...

Bo Yueming podría soportarlo por el bien de la situación general, pero hoy, la otra parte había tocado su resultado final y ¡no podía soportarlo más!

"Eso no funcionará. Si lo matas, serás culpable". Pei Yi besó los labios de Bo Yueming y dijo con pesar: "Deberíamos enviarlo a la cárcel, cuanto más tiempo, mejor".

Para un joven maestro como Bo Guancheng, que estaba acostumbrado a vivir una buena vida, enviarlo a prisión sería peor que la muerte para él.

Bo Yueming respiró hondo. "No hables de él, déjame ver. ¿Dónde estás herido?

Pei Yi dijo con la conciencia culpable: "No estoy herido, ah ".

Bo Yueming desacreditó las excusas bien intencionadas de su amante. "No puedes ocultármelo. Durante la videollamada de hace un momento, acercaste el teléfono a propósito porque tenías miedo de que yo te viera y me distrajera durante la reunión".

"......."

Bo Yueming lo llevó a sentarse en el sofá. "¿Este abrigo es del señor Qin?"

"Eh, hoy me tomaron por sorpresa y me ataron, y no tenía suficiente ropa..." Mientras hablaba, Pei Yi recordó una cosa importante.

Su expresión cambió y levantó la mano, golpeándose el muslo con fuerza, pero desafortunadamente, su pregunta tácita cambió de tono: "—¡Silbido ! "

Su brazo derecho herido se entumeció con el movimiento y el rostro de Pei Yi se torció.

Bo Yueming se sintió repentinamente ansioso. "¿Qué ocurre?"