抖阴社区

XIV

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⚠️ Contenido Explícito

Me desperté por el ruido de una puerta y cogí el mando.

Gavi hizo acto de presencia al entrar en el salón y me miró sonriendo.

– Me has asustado.– dije soltando el mando.

– ¿Ibas a tirarme el mando princesa?

Reí y le vi venir hasta mí y darme un beso.

– ¿Tienes hambre?– pregunté sonriendo.

Él asintió con énfasis como un niño pequeño y me levanté.

– Vamos a hacer espaguetis.– dije yendo a la cocina.

– ¿Vas a cocinar para mí Livvie?

Sonreí y cogí una cacerola y la llené de agua.

– Lávate las manos, vas a ayudarme.

– Deja que me duche antes.

– No. Lávate las manos.– ordené.

Gavi me miró sonriendo y entonces después de lavarse empezó a ayudarme a hacer los espaguetis.

Una vez listos, nos sentamos a cenar y cuando acabamos le dejé irse a la ducha mientras yo fregaba los trastos sucios.

Un poco después sentí sus manos en mi cintura.

– ¿Sabes qué?

Sonreí y moví la cabeza para que continuase hablando.

– Sigo teniendo hambre.

– ¿En serio Martín? Te has comido media cacerola tú solo.

– ¿Martín? Y no, no hambre de comida, cariño.

Tragué saliva al darme cuenta y entonces una de sus manos se coló por debajo de mis pantaloncitos de pijama y mi ropa interior.

Eché la cabeza hacia atrás apoyándola en su hombro al sentir sus dedos entrar en mi interior.

Solté un quejido y entonces me susurró al oído.

– Cariño... ¿Cuánto más vas a esperar?

Me giré y lo miré.

– Se acabó la espera, Gavi.

Me dio una sonrisa y entonces me cogió en brazos para subir a su habitación.

Me lanzó a la cama y reí viéndole llegar hasta mí y ponerse encima para después besarme.

Mis piernas se cruzaron alrededor de su cadera y entonces bajó mis pantalones y mis braguitas.

– Tenía tantas ganas de hacer esto desde que te metiste en la ducha conmigo.– susurró mirándome mientras se deshacía de mi ropa.

Tiré de su camiseta y entonces él también se desnudó.

Acaricié su espalda desnuda y vi los rizos de su pelo bajar por mi estómago hasta llegar a mi intimidad.

Tiré de ellos al sentir su lengua hundirse en mi interior y arqueé un poco la espalda.

Hacía demasiado tiempo que no mantenía relaciones.

Sus manos fueron hasta mi culo y lo apretó a su antojo.

Solté varios gemidos que le envalentonaban a seguir con su trabajo.

Entonces todo me parecía surrealista.

El chico del que estaba enamorada desde pequeña estaba aquí, en su cama, conmigo.

Mi yo de aquellos años chillaría al vernos en estos momentos.

???? ??? ???? +18 | Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora