⚠️ Contenido Explícito
Gavi iba a dar la vuelta para irse, pero lo miré y empecé a negar con la cabeza.
– ¿Qué quieres?
– Entrar.
Me bajó y después de darme la mano, entramos a la sala.
Estaba oscura y vacía.
Gavi avanzaba delante de mí, entonces cerré la puerta y se giró mirándome.
– Olivia...
– ¿Sabes las ganas que tengo de matarte? ¿Por todas las noches que me he pasado llorando y pensando en todas las cosas que podías estar haciendo con ella y no conmigo
Me acerqué a él y levanté la cabeza para mirarle.
– No voy a hablar de esto ahora, vas borracha y-
Lo empujé hasta sentarlo en una butaca como las de cine y me senté encima.
– Olivia vas borracha y mañana vas a odiarme por esto.
– Ya te odio ahora.– murmuré y entonces besé su cuello.
Tiré de su pajarita y la tiré por ahí para después ir desabrochando todos los botones y le quité el chaleco.
– Tantas capas, joder.– espeté cuando empecé a desabrochar la camisa.
– Olivia-
– Gavi, no quiero hablar ahora, quiero follar contigo, aquí, ahora.
– ¿Y ya?
Lo miré fijamente.
Sabía que no iba a poder echar un polvo con él y ya está.
No me dijo nada más y entonces devoró mi boca.
Le sentí bajar una de sus manos y las coló por debajo de mi vestido.
Echó a un lado mi ropa interior y entonces metió dos de sus dedos.
Solté un gemido y le mordí el labio mientras buscaba la hebilla de su cinturón.
Iba a empezar a odiar que se pusiera trajes de corbata.
Le quité el cinturón y le desabroché el pantalón para empezar a bajarlo con su ayuda.
Gavi me quitó las bragas y entonces me miró fijamente.
Me agarré a sus hombros y entonces fui bajando a lo largo de su longitud.
Cuando llegué al final empecé a moverme apoyando los brazos en el respaldo de la butaca.
Gavi atacó mis labios y sus manos llegaron a mi culo para controlar los movimientos.
– Estás preciosa.
Lo miré fijamente y seguí moviéndome.
Estaba intentando hacerme la dura con él.
– Se nota que necesitas España amor, estás muy blanca.
Sus labios fueron a mi cuello y cerré los ojos mientras saltaba encima.
Gavi gruñía y entonces pulsó algún botón que hizo que sus piernas subieran.
Nos miramos por unos segundos y me eché a reír mientras seguía moviéndome.
Me miró sonriendo y entonces agarró mi nuca y me besó.
Había echado tanto de menos sus besos que ahora mismo sentía que podía respirar.
Sus manos bajaron el escote del vestido y agarró una de mis tetas.
– ¿Quién te ha dado permiso para venir sin sujetador?

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???? ??? ???? +18 | Pablo Gavi
Teen FictionOlivia y Gavi se conocen prácticamente desde que llevan pa?ales, pero ?qué puede cambiar en cuanto Gavi se va a Barcelona?