Sing Me ?KOOKTAE!

TaeHyung y JungKook estaban en la cama acostados, abrazados con las sabanas hechas un desastre. El menor con su pierna libre la tenía alrededor de la cadera del castaño.
Solo que TaeHyung se despertó al tener la luz del sol en su cara causa de las cortinas que no estaban cerradas.
El rubio se levanta cuidadosamente y va a cerrar las cortinas dejando todo un poco oscuro, y volvió hacia su novio para dormir más junto a él.

—TaeTae...—llamó JungKook con los ojos cerrados.

—Kookie...

—Te...—pauso el mayor.

—¿Te?.—preguntó y alargo la última letra.

—Te quiero comer a besos.

Y eso fue lo que hizo exactamente JungKook, literalmente, abusó de esos labios como si su vida dependiera de ello. El castaño amaba todo de TaeHyung pero en secreto, primero estarán sus labios. Le gustaba sentir como se hinchaban cada vez que mordía —'sin intención'— el belfo inferior.

Siguió besando hasta tener a TaeHyung en el otro extremo de cama y las muñecas eran agarradas por las manos fuertes de JungKook, quien no ejercía tanta fuerza para no hacerle daño a su novio.

—¡Para!.—río silenciosamente el menor entre besos y JungKook solo siguió.

—¡Dijo qué pararas, Jeon!.—y una tercera persona había entrado a la habitación de repente, gritando.

—¿Jinnie?, no...

Y en cuestión de unos segundos el zapato rosa pastel de SeokJin impacto en el rostro de JungKook con bastante fuerza.

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—TaeTae, no... Duele mucho.—el castaño se quejaba, pero por el otro lado también disfrutaba de tener a su novio en su regazo mientras curaba la herida que le había hecho su propio cuñado.

—SeokJinnie, no es por nada, pero... ¿Cómo entraste acá? y aparte no me dijiste que ya estabas acá en Seúl.

—Uno, deberían esconder la llave de emergencia en otro lugar, que no sea la parte de arriba del marco de la puerta.—dijo demasiado obvio el mayor de los tres. — Y dos, llegué anoche y me dije... ¿Por qué no ir al nido de amor de mi hermano y mi cuñado?, pero vaya sorpresa me encontré de que querías violartelo.—lo último fue dirigido a JungKook.

—No lo iba a violar. ¡Hum!, duele...—se siguió quejando el castaño.

TaeHyung trataba de pasar cuidadosamente el algodón con alcohol, por ese rasguño —que estaba ubicado en el pómulo izquierdo— más o menos profundo en donde salía sangre y alrededor del rasguño estaba un poco morado. Después de desinfectar todo le puso una pequeña bandita en el lugar y le dio un beso en los labios a JungKook.

—¡Querías robarle su virginidad!.

—¿Cuál virgin...? ¡Hey!.—exclamó el castaño cuando sintió un golpe en sus costillas.

SeokJin tenía los ojos abiertos como platos. —N-no puede ser, TaeTae.—el mencionado se sonrojó violentamente. —¡Te robaste la inocencia de mi hermanito!.

JungKook solo ignoró las quejas de su cuñado mientras veía el sonrojó de su hermoso novio.

—Ugh. JungKook, siempre creeré que eres una mala influencia.—rodó los ojos en broma. —Iré hacer el desayuno.—y se fue a la cocina.

—Voy a ayudarlo.—y cuando TaeHyung quiso salir del regazo de JungKook esté hizo que se volviera a sentar.

El mayor de los dos sonrió y sus dos narices se acariciaron. Se balanceaban constantemente, uno de los dos se acercaba para besar los labios del contrario pero el otro se alejaba, haciendo lo mismo siempre.

—¿Ya puedo besarte?.—dijo TaeHyung con los ojitos cerrados.

—¡No!. JungKook, si quieres mi bendición, ven a ayudarme en la cocina.—decía SeokJin.

El castaño bufo contra la boca de su novio y lo besó enfrente de la tercera persona que estaba presente. Una luz y un sonido hizo que se separan.

—¡Lo siento!, son la pareja perfecta.—SeokJin sonrió mientras verificaba las fotografías que tomó y después pasó a una mirada fruncida. —Pero te sigo odiando Jeon.