El mar chocaba con fuerza contra los acorazados de Noxus, pero dentro del buque principal, reinaba un orden férreo, casi brutal.
El sonido metálico de las lanzas resonaba con eco entre los compartimentos de acero negro.
Ambessa Medarda, firme y dominante como siempre, giró la lanza con precisión antes de lanzarse con rapidez hacia su aprendiz, Caitlyn Kiramman, quien se defendía con determinación, aunque con algo de torpeza. Sus movimientos eran rápidos, sí, pero aún pulidos por la lógica, no por el instinto.
- Ambessa : Noxus -decía Ambessa mientras sus pasos resonaban pesados sobre la cubierta de entrenamiento-, reconoce la fuerza por encima de cualquier cosa... y la define con tres principios clave.
Con un rápido giro, golpeó la lanza de Caitlyn, desestabilizándola. Luego señaló con la punta de su propia arma al pecho de la joven.
- Ambessa : Visión -continuó, con voz severa pero formadora-. La cúspide del triángulo. Visualizar un camino... y contar con la sabiduría para navegarlo.
Caitlyn asintió mientras recuperaba su postura, sudor en su frente, pero sus ojos seguían fijos, decididos. Ambessa ladeó la cabeza, satisfecha.
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- Ambessa : Esa será tu base, niña. Tus ojos ven lo que otros no ven. Esa claridad será tu ventaja.
A unos metros de distancia, Haytham, sin decir palabra, afilaba su espada sobre una piedra negra noxiana. Su mirada, aunque centrada en la hoja, de vez en cuando se desviaba hacia Caitlyn, evaluando. La consideraba débil aún... pero prometedora.
Ambessa rodeó a Caitlyn y continuó:
- Ambessa : Voluntad. La capacidad de modificar tu entorno a tu voluntad. Tu velocidad ha mejorado... pero eventualmente necesitarás fuerza. Fuerza para romper estructuras. Para marcar el terreno. Para sobrevivir.
Las lanzas volvieron a chocar con un estruendo agudo y vibrante. Caitlyn, más ágil que nunca, se deslizaba por el suelo metálico del barco, girando sobre su eje, esquivando con elegancia los ataques de Ambessa, y contraatacando con firmeza y velocidad.
- Caitlyn : La fuerza en exceso... nos deja expuestos -dijo Caitlyn entre jadeos, mientras apartaba una estocada con el mango de su lanza y giraba para lanzar una rápida ofensiva.
Ambessa detuvo el golpe con una sola mano, su lanza firmemente anclada, como una muralla. Sonrió de medio lado.
- Ambessa : Correcto. Pero recuerda el tercero y último principio de Noxus...
Ambessa se adelantó de golpe, obligando a Caitlyn a retroceder. El choque de las armas se volvió más intenso, más violento. Caitlyn intentó usar su entorno, saltando por encima de un banco de entrenamiento, buscando una apertura.
Pero Ambessa era una veterana de mil batallas.
- Ambessa : Astucia , Fantasmas, embusteros, magos, asesinos... -decía mientras su lanza giraba con una precisión inhumana- Carecen de honor. Carecen de responsabilidad. Solo los fuertes... y los sabios... sobreviven.
