ＧＯＬＤＥＮ →ＢＴＳ ?

¡Maratón #2!

El día comenzó con una extraña sensación de calma. No de esa calma que anticipa una tormenta, sino una que envuelve todo con una calidez reconfortante. 

Sohyun no se dio cuenta de inmediato. Fue algo sutil, casi imperceptible, pero definitivamente estaba allí. 

Todo comenzó por la mañana, cuando despertó y sintió un peso adicional sobre su cintura. 

—Mmm…— murmuró adormilada, intentando moverse, pero algo la mantenía pegada al colchón. 

Abrió los ojos lentamente y lo vio. 

Taehyung estaba completamente aferrado a ella, su rostro enterrado en su cuello, su brazo fuertemente enroscado alrededor de su cintura. 

—Tae…— susurró, con una pequeña sonrisa —¿desde cuándo eres un koala? 

El solo emitió un murmullo indistinto y se acurrucó aún más. 

—Cinco minutos más… 

Sohyun rodó los ojos con diversión. 

—Dices eso, pero son las diez de la mañana. 

Tae hizo un pequeño sonido de protesta y, sin previo aviso, deslizó una mano por debajo de la camisa de ella, acariciando su espalda con lentitud. 

—Si sigues así, vamos a quedarnos aquí todo el día…— dijo Sohyun, tratando de mantener un tono neutral, pero su voz la traicionó. 

Taehyung sonrió contra su piel. 

—Ese era el plan. 

Sohyun se mordió el labio. Tae podía ser juguetón, pero había algo diferente en él hoy. Había una dulzura palpable en sus gestos, un deseo silencioso de mantenerse cerca de ella. 

Y no solo eso. 

Cuando finalmente logró escapar de la cama y se dirigió a la cocina, él la siguió como una sombra. 

—¿Qué quieres desayunar?— preguntó ella mientras sacaba ingredientes. 

—A ti. 

Sohyun le lanzó una mirada incrédula. 

—Kim Taehyung. 

Él se encogió de hombros con una sonrisa traviesa antes de rodearla con los brazos por detrás. 

—Solo digo la verdad… 

—Si sigues así, no vamos a salir de casa nunca. 

—Eso tampoco suena mal. 

Sohyun suspiró, pero no pudo evitar reír. 

Sin embargo, su atención cambió cuando su teléfono vibró con un mensaje. Era del grupo de BTS.