?*?? ????? Donde hago que tus historias se
hagan realidad en un único capítulo.
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tu bias y cantante fa...
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El ambiente en el estudio de grabación estaba animado. El equipo ajustaba las cámaras, las luces parpadeaban con diferentes tonalidades y los técnicos verificaban los micrófonos. El set de Run BTS estaba listo para un nuevo episodio, y los miembros llegaban poco a poco, aún con la energía de la mañana.
Jungkook entró con paso tranquilo, vistiendo su habitual chaqueta negra, una gorra cubriendo parte de su rostro y un café en la mano. Se veía relajado, aunque ligeramente somnoliento. No había dormido mucho la noche anterior… y el motivo de eso aún ardía en su piel.
Soltó un bostezo mientras dejaba su café en la mesa y saludaba con un simple:
—Ya estoy, chicos.
Nadie respondió de inmediato, pero sintió varias miradas clavarse en él. Frunció el ceño, apenas moviendo la cabeza debajo de la gorra.
—¿Qué?
Namjoon fue el primero en reaccionar. Cruzado de brazos, lo observaba con una expresión neutral… demasiado neutral.
—¿Has dormido bien, Jungkook?— preguntó, con un tono que claramente no era inocente.
Jungkook frunció más el ceño.
—Sí… creo. ¿Por qué?
—Oh, no, nada.— intervino Taehyung con una sonrisa socarrona —Es solo que pareces… marcado por el cansancio.
Jungkook parpadeó, desconcertado.
—¿Eh?
Se llevó una mano al rostro instintivamente, revisando si tenía ojeras más marcadas de lo normal.
—No, no ahí…— rio Jimin, apoyando su brazo en el hombro de Jungkook antes de inclinarse y señalar discretamente la zona de su cuello —aquí.
Jungkook se tensó de inmediato.
—¿Qué…?
Se quitó la gorra y miró a los chicos, pero ahora todos tenían la misma expresión divertida. Fue Hoseok quien sacó su teléfono y, con una sonrisa satisfecha, le mostró la pantalla.
Una foto en la que Jungkook aparecía justo en el momento en que inclinaba la cabeza para beber su café. La iluminación del estudio ayudaba a resaltar lo que antes había pasado desapercibido.
Justo en el lado izquierdo de su cuello, un tono rojizo-violáceo se asomaba claramente sobre su piel.
Un chupetón.
Uno que definitivamente no estaba ahí cuando salió de su casa esa mañana.
Jungkook sintió una ola de calor subirle hasta las orejas.
—Joder…— exhaló, pasando la mano por su cuello como si eso fuera a borrarlo.
—¿Quieres explicarnos cómo terminó eso ahí?— preguntó Yoongi con una ceja arqueada.