No necesito ayuda, soy grande [ABDL]

[Minutos antes]

Estaba practicando mis colocaciones con Matt, sinceramente aún me cuesta acoplarme a que Matt se le de por intentar una nueva jugada cada semana. Cuando por fin me acostumbro a un modo de rematar de el, me saca otro. Juro que lo voy a matar si me pide otra especificación para levantar. Y creo que Simón también está con pensamientos que hacen daño a la integridad personal. Porque ya se cansó de recibirle y ahora cada vez que falla le saca el dedo del medio.

-Alan, necesito que la coloques más rápido, en el momento en el que remato los tiempos no coordinan- Me señaló Matt, analizando los últimos 30 intentos que habiamos hecho. Yo por mi parte respire profundo.

Recuerda... Es amigo, no posible próximo asesinato...

-Ponme rápido esta - Me quejé entre dientes, par que Matt no me escuche -¿Y no crees que el problema es que te distraes mucho?...Mathew- Enfoqué toda mi ira en esa última palabra. Haciendo que el moreno diera un pequeño salto, del susto.

-Ah si, buen punto- Dijo nervioso, eso pensé Matt...eso pensé...

Suspire mientras acariciaba mi nuca, aún tenía las ganas de enterrar vivo a Matt, solo que sería mucho esfuerzo enterrar el cuerpo.

Iba a pedirle una vez más a Matt, cuando lo veo (otra vez) viendo a Ciel jugando con mi principito a unos metros. Pasándose una pelota, probablemente fingiendo que es el partido más épico de sus vidas.

Que tiernos... Pero eso no justifica la perdida de concentración de Matt -¡Que te concentres, carajo!- Le jale la oreja empezandosrla a tirar cada vez más fuerte con cada palabra -¡Te vuelves a distraer y te juro que la «cosa» de Alex no será lo único que te entre por el- No alcance a terminar mi amenaza cuando una voz algo peculiar mi interrumpió (buscando morir).

-No sabía que una cosita tan linda tendria tanta rabia por dentro- Se escuchó una voz con un acento que ya conocía. Gire mi cabeza, aún sosteniendo la oreja de Matt con la misma fuerza, y el cobarde empezando a lagrimear.

-¿Tu eres el man que me encontré la otra vez?- Le dije sin rodeos hacia el rubio que se mantenía cruzados de brazos con un dulce en la boca y una sonrisa burlona.

¿Que estará buscando? Lo que sea que fuera, acá está mi niño y si se atreve a tocarlo... Créanme cuando le digo que nadie saldrá vivo, no importa que tenga que hacer en el proceso.

-¿Que quieres? Largate- Le dije antes que pudiera responderme, mirándolo fulminante, poniéndome firme para soltar a Matt con fuerza, preparándome si este tipo quiere pelea.

-Oye, casi me quitas la oreja- Se quejó Matt cuando por fin lo solté.

-Te callas- Lo amenace. El de inmediato dió un paso atrás, alzándo sus manos en señal de que no quería morir hoy.

-Che, que agresivo sos vos, no vengo a pelear, mi jefe me mandó a buscar a su noviecito, es todo- Se alzó de hombros, mirándome desafiante ¿Quien se cree? Iba a responder cuando Matt habló.

-¿Y porque Alex vino contigo?- Pude sentir el semblante de Matt cambiar, se puso más serio y tensó los hombros.

-Porque me lo cogí antes de llegar- Nos miró desafiantes. Cada vez que habla siento más ganas de cortarle las extremidades. Apreté los puños demostrando cada vez mi enojo, y creo que mi intención fue clara al notar como el rubio dió un pequeño paso atrás, aún con su expresión arrogante.

-¡¿Discúlpa?!- Detuve a Matt antes de que se le mandará encima a este idiota.

-Nah, es broma- Se rió el muy maldito mientras nos apuntaba con su dulce -No es mi tipo, prefiero castaños, blancos, ojos cafés, con aretes, voleibolistas con el número 15, No se,¿se te hace a alguien?- El muy hijo de puta me tiró una mirada seductora, mirándome de pies a cabeza mientras se mordía el labio. ¿Lo peor? ¡Mi cuerpo me traicionó sonrojándose por el imbécil! Y Matt no ayuda, solo se quedó mirando con rabia al rubio luego de darle permiso a Ciel que valla donde Alex el cual al notar todo se fue corriendo.