El demonio lo levantó con facilidad y lo arrojó a un lado como si fuera un juguete roto.
Un latido ensordecedor resonó en mis oídos.
Mis manos temblaron de rabia.
— Vas a pagar por esto...
El demonio sonrió, deleitándose con mi furia.
— Inténtalo, cazadora.
Tomé una bocanada de aire y apreté con fuerza la empuñadura de mi espada.
No podía permitir que siguiera matando.
No esta vez.
El agarre en mi katana se volvió más firme mientras sentía un ardor en el pecho, una mezcla de ira y determinación. No había podido salvar al cazador... pero aún podía detener al demonio.
— Respiración del Viento...
El demonio se movió rápido, como un borrón en la oscuridad, lanzándose hacia mí con una expresión hambrienta.
— ¡Tercera Forma: Torbellino Cortante!
Grité mientras giraba sobre mi propio eje, desatando una tormenta de cortes afilados.
El demonio se detuvo en seco al ver las ráfagas de viento cortante dirigirse hacia él. Intentó esquivar, pero era demasiado tarde.
— ¡Gah!
Mis ataques impactaron su torso y brazos, dejando profundas heridas. La sangre negra brotó, manchando el suelo.
— Maldita mocosa...
El demonio se tambaleó, pero su sonrisa permaneció.
Mis ojos se estrecharon. Algo no estaba bien.
Entonces, su piel comenzó a moverse de forma antinatural. Las heridas que le había hecho se cerraban rápidamente.
Regeneración.
Chasqueé la lengua.
— Qué molesto...
El demonio se inclinó hacia adelante y, en un parpadeo, apareció justo frente a mí.
Intenté reaccionar, pero su mano se cerró alrededor de mi cuello con una velocidad aterradora.
— Veamos qué tan fuerte eres sin aire...
Apreté los dientes, intentando liberar un nuevo ataque, pero su agarre se volvió más fuerte. El oxígeno comenzaba a faltarme, mi visión se nubló por un instante. No... No podía acabar así.
Con todas mis fuerzas, levanté mi katana y la incrusté en su brazo. El demonio gruñó de dolor, aflojando ligeramente su agarre.
Era mi oportunidad.
— ¡Respiración del Viento, Sexta Forma: Tormenta Negra!
Puse toda mi energía en un solo movimiento, liberando una ráfaga de cortes incontrolables. El demonio gritó cuando las cuchillas de viento lo atravesaron. Salté hacia atrás, tomando una bocanada de aire. Pero aún no había terminado, me lancé hacia él con todas mis fuerzas.
— ¡Muere!
Con un último giro, mi katana descendió directo a su cuello. El demonio abrió los ojos con sorpresa... y en un instante, su cabeza rodó por el suelo. El cuerpo cayó inerte. Jadeé, sintiendo mis piernas temblar.
— Lo logré...
Pero antes de que pudiera relajarme, una voz seria resonó a mis espaldas.
— Natsume
EST?S LEYENDO
La maldición de quererte | ????? ??????
FanfictionEn un mundo asolado por demonios, Natsume lucha por la justicia sin saber que el destino la unirá a Obanai Iguro. Entre batallas, sacrificios y sentimientos ocultos, ambos descubrirán que algunas promesas trascienden el tiempo. ?FICCI?N?
Capítulo 12
Comenzar desde el principio
